Los expertos denuncian la marginación que sufren las personas mayores en la sociedad actual. El reto del siglo XXI es que los jubilados ocupen el lugar que les corresponde en la sociedad. En este sentido, los expertos hablan de un "envejecimiento activo".

Así, el psicólogo Carlos Hidalgo recuerda que mientras en otras culturas a estas personas se les tiene una "alta estima", porque han acumulado un montón de experiencias, aquí se produce una falta de respeto hacia cualquier persona con más de 60 años, sobre todo, por parte de los jóvenes. Esta situación provoca que muchos se ven a sí mismos más bien como un "estorbo", según constató Hidalgo.

Igualmente, Francisco Caparrós, presidente provincial de la Unión Democrática de Pensionistas, recuerda que hay problemas como la soledad. "Falta un poco de cariño y de respeto hacia las personas mayores", dijo.

20 AÑOS POR DELANTE Así, Salvador Cabedo, director de la Universitat per a Majors de la Jaume I, recordó que desde que una persona se jubila o prejubila le queda un tercio de vida por delante, es decir, 20 años o más, que vale la pena vivir activamente. Es lo que se conoce como el "envejecimiento activo". "El mayor no es un sujeto pasivo sino una persona reflexiva y con criterio que elabora su propia participación en la sociedad", dijo.

"Aunque se jubile profesionalmente --manifestó-- mantiene la misma calidad, condiciones y dignidad", explicó Cabedo, quien recordó, además, que estas personas fueron los artífices del Estado del Bienestar y es "de justicia" que se lo devolvamos.

Uno de los problemas, según explicó el psicólogo, es que, conforme se ganan años se van perdiendo facultades a nivel físico y psicológico. Sin embargo, esa merma se puede retardar practicando un deporte adecuado a cada edad, como caminar o hacer natación, y llevar una correcta alimentación. Además, se van perdiendo amigos por el camino y ello genera melancolía. "Mucha gente empieza a padecer temor hacia la muerte debido a que fallecen sus amigos". "Hay que pensar que la vejez es un regalo para descubrir cosas que no podías hacer durante el ejercicio de la actividad laboral, para que el paso de la jubilación no suponga llegar a una inactividad, sino un envejecimiento activo", explicaba Hidalgo.