El cerco a la libertad de horarios que ha anunciado la Conselleria de Industria y Comercio ha sido bien recibida por los consumidores.

El presidente de la Unión de Consumidores de España (UCE) en Castellón, Juan Carlos Insa, asegura que "la modificación de la norma permite que abran en domingos y festivos los comercios de hasta 150 m, por lo que seguiremos podiendo comprar todos aquellos productos básicos sin tener que esperar a que llegue la jornada laboral de entre semana".

Insa manifiesta su apoyo al pequeño comercio y destaca que desde esta entidad "siempre hemos estado en contra de liberalizar los horarios porque esto acabaría repercutiendo negativamente sobre el consumidor". Según señala, "a más tiempo de apertura, más gasto para el empresario y peligro del cierre de tiendas, por lo que se reduciría la oferta".

"Lo más importante es que la regulación actual no sirva de saco en el que se incluya cualquier tipo de comercio", afirma. Además, detalla que en los grandes bazares chinos actuales "se venden muchos artículos que no resultan básicos, por lo que no se justifica que deban estar operativos todos los días de la semana".