El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, lamentó ayer el anuncio del ministro de Fomento, José Blanco, cuyo recortazo supone la “paralización absoluta de la línea AVE a Castellón”, e insistió en que seguirá buscando el apoyo ciudadano por un acceso igual a las infraestructuras a través de la campaña de rebelión cívica.

“Tras seis años anunciado promesas y haciendo brindis al sol sobre un proyecto que no pensaban ejecutar, al fin ahora se ponen las cartas boca arriba y el PSOE deja patente su absoluto desprecio por esta ciudad y esta provincia, alejando cualquier posibilidad de una alta velocidad que tienen más de 30 ciudades de toda España”, resaltó Fabra.

El dirigente popular recalcó que “Blanco y Zapatero, con su pésima gestión económica, están condenando a la economía castellonense a la parálisis y al ostracismo”. Y añadió que ahora “cuando en toda España, con dinero público de nuestros impuestos se han hecho tramos de alta velocidad a Andalucía, Cataluña, Galicia, Castilla La Mancha e incluso Asturias, enfrente tenemos el trato a Castellón; nos dejan fuera de toda oportunidad de competir en turismo y en negocios”.

“CASTIGO ABSOLUTO” // El munícipe calificó el ajuste de “castigo absoluto a un territorio que ha dado mucho a los fondos del Estado. Hemos perdido 7 años y ahora, ni se sabe qué va a suceder”.

Fabra abogó por un “basta ya” a la discriminación territorial y recordó que el AVE se frena, pero “ni se van a hacer” la N-340, el acceso ferroviario al puerto por el sur, la A-68 o el corredor mediterráneo de mercancías. Este recorte deja a cero la inversión del Gobierno en Castellón en 2010”.

Sobre la campaña cívica, la junta directiva de la CEC ya ha suscrito el manifiesto. Ayer, Juan José Monzonís, lo hizo también a título individual como presidente de la Autoridad Portuaria, tras plantear la propuesta fuera del orden del día en la reunión del consejo de administración. El propio Monzonís aportó esta solución, así como la de incluir el tema en el próximo consejo, que tendrá lugar ya en septiembre. H