La provincia de Castellón ha registrado un total de ejecuciones hipotecarios superior a las 5.300 entre los años 2007 y el 2010, según se desprende los datos del Boletín del Consejo General del Poder Judicial. Es decir, es la cifra de las familias que han perdido la propiedad de su piso por no poder pagar las cuotas de la hipoteca desde que se inició la crisis económica.