Desde que comenzó la crisis, Cáritas ha ayudado a 2.600 familias de la provincia de Castellón a pagar el alquiler y las facturas básicas de suministro para evitar su desahucio. Para hacer frente a estos pagos ha destinado desde 2008 cerca de 600.000 euros.

Además, la entidad puso en marcha un fondo de crisis para dar respuesta a las ayudas solicitadas por 35 municipios de la provincia de Castellón. Aunque Cáritas prestaba este servicio antes de la crisis, en los últimos cuatro años se han quintuplicado las familias atendidas, así como la partida destinada al pago del alquiler. Se ha pasado de destinar 35.500 euros para ayudar a sufragar el gasto de la vivienda a un centenar de familias al año a atender a unas 500 y aportar 150.000 euros a este menester. A estas cabe añadir las acciones que también realiza Cruz Roja.

Debido a la grave crisis, que está dejando a muchas familias sin techo, Cáritas Castellón ha creado una comisión de la vivienda para estudiar los casos que les llegan de personas en peligro de perder la vivienda donde residen. Está previsto que esta comisión analice cada solicitud y ayude al inquilino a lograr un rebaja del precio del arrendamiento o a buscar otro más económico que se pueda ajustar a sus ingresos.

HIPOTECAS // Esta oenegé católica centra sus esfuerzos en evitar desahucios por impago del alquiler, pero también presta atención a los desalojos por ejecuciones hipotecarias de los bancos. “La entidad económica de este problema es tan elevada, que no podemos hacer frente a ello”, ha remarcado el director de Cáritas en Castellón, Juan Manuel Aragonés.

El colectivo ha llevado a cabo en los últimos meses cuatro exhortos en los juzgados para evitar que la familia fuera desalojada, en tres de ellos se ha evitado el desahucio. Según Aragonés, “cada vez más estamos haciendo gestiones con los bancos para intentar renegociar las deudas”. H