El PSPV-PSOE tiene en este curso político que hoy empieza el nada desdeñable papel de demostrar que pueden ser, de nuevo, la alternativa válida al PP, ya que las encuestas arrojan que, pese al desgaste de los populares, la estimación de voto de los socialistas, lejos de mejorar, empeora. Ayer, el secretario general del PSPV, Ximo Puig, quien sin embargo no tiene escaño en Les Corts, aseguró que “ya nadie espera nada de Fabra porque es el momento del cambio”. A su juicio, el debate de hoy debe estar centrado “en cuestiones fundamentales como la Educación o la Sanidad”, el “grave” problema de la falta de empleo o “el proceso de deterioro de la democracia debido a los casos de corrupción masivos”.
