Algunos opinan que ha perdido la capitalidad, otros que no, y otros ni lo saben. La importancia del tejido comercial local es aún importante pero no lo suficiente, para ser lo que es. El centro, por sus accesos y el coste de su aparcamiento, no compite en igualdad de condiciones con los grandes formatos de la periferia, donde aparcar es gratis. También hay incertidumbre por la barrera del TRAM, que aunque ha ayudado a la peatonalización requeriría de reajustes para no obstaculizar aún más la entrada de clientes en coche al centro. Consideran que han de reclamar más implicación a la Administración, que aunque sí dinamiza con actividades, juega un papel a la hora de impulsar más la competitividad con infraestructuras.