Los sanitarios de Castellón lanzan un SOS: «No queda casi espacio en los hospitales, estamos saturados». Los pronósticos sobre los efectos devastadores de la tercera ola «se quedaron cortos» si se tiene en cuenta la realidad que están viviendo los tres hospitales públicos de Castellón dedicados a la lucha contra la pandemia. El General de Castelló, la Plana de Vila-real y el Comarcal de Vinaròs. Todos ellos han puesto en marcha sus planes de contingencia para intentar dar una respuesta asistencial al repunte descontrolado de nuevos contagiados que requieren ser ingresados. Para ello, se han habilitado nuevos espacios para disponer de más camas, se ha doblado la capacidad de las unidades de cuidados intensivos hasta al menos 80 boxes. Pero, como advierten los sanitarios, «el sistema también tiene sus limitaciones».

Actualmente, hay ingresadas 367 personas, lo que supone 13 más que un día antes. De estas, 40 de ellas se encuentran en estado grave. La capacidad en el General de Castelló (575), la Plana de Vila-real (260) y el Comarcal de Vinaròs (150) es de casi 1.000 camas. Por tanto, actualmente, cerca de cuatro de cada diez camas estarían ocupadas por enfermos covid, aunque un elevado número de camas del General, con habitaciones compartidas, están inutilizadas al estar los pacientes ingresados de manera individual.

«No tenemos mucho más margen de maniobra», señalan desde CCOO, al tiempo que alertan del «colapso» que se está viviendo en Urgencias del General. Para intentar dar una respuesta, desde el centro apuntaron que se ha habilitado el hospital de campaña para los preingresos de pacientes covid, es decir, enfermos que están en estas instalaciones hasta que se les asigna una planta. De momento, el hospital de campaña no acoge a ingresados por coronavirus, aunque la Conselleria de Sanidad ha dispuesto las instalaciones, en concreto, unas 80 camas, para poder prestar asistencia en cualquier momento.

«La situación es terrible, especialmente, en Vinaròs, donde ya no tienen técnicamente plazas UCI, de hecho han estado derivando a pacientes al General y también enfermos de medicina interna al Hospital Vithas, lo mismo que esta haciendo la Plana», apuntaron desde CSIF. «Hoy -en referencia a ayer- es un día muy malo en el General, donde se ha pasado de 20 a 28 pacientes covid en UCI en muy pocas horas y sigue en aumento. Es una jornada desoladora para los profesionales sanitarios», resaltaron desde CSIF.

De igual modo, desde el sindicato médico CESM-CV advirtieron de que la Plana también está derivando pacientes que requieren una intervención al hospital privado IMED de València.

«La situación es crítica, las unidades de cuidados intensivos se están llenando de enfermos covid. Hemos llegado tarde, la Navidad ha sido una bomba de relojería», apuntaron desde Satse.

Donde también están llegando pacientes no covid procedentes de los tres hospitales es al Provincial, un centro libre de coronavirus que efectúa tareas de apoyo.

«Hay una larga cola en las urgencias, ya no damos abasto»

«El repunte de pacientes es tal que ya casi no caben en el hospital. El miércoles había una cola de 17 personas esperando en Urgencias porque no había boxes disponibles», explica una enfermera de Urgencias del Hospital General de Castelló, quien advierte de que ya no se puede ingresar a todos los enfermos «a los que nos gustaría». Asegura que la primera ola no es comparable a la actual, porque «ahora no damos abasto, el sistema sanitario no puede abarcar la inmensa demanda de personas con coronavirus», lamenta esta profesional. «Antes era gente mayor, pero ahora vienen personas de 40 y 50 años que hay que ingresar».

«Nos encontramos sobresaturados, la situación es grave»

La situación es más que crítica en el Hospital Comarcal de Vinaròs debido a su más reducida capacidad. «He sido una mañana horrible, estamos sobresaturados, no damos más de sí», señala una médico que ejerce en este centro, quien advierte de que los contagios entre el personal sanitario también afecta de forma considerable a la asistencia que se está prestando debido a la falta de profesionales para dar respuesta a una crisis sanitaria como la actual. «Nos intentamos ayudar entre los servicios como podemos, pero la situación es muy grave. La gente debe ser consciente de lo que está pasando», señala.

«Los hospitales están colapsados, se había advertido»

«Siento una decepción absoluta con la sociedad, porque ya sabíamos lo que era el virus y esta tercera ola la podíamos haber evitado», lamenta un enfermero del Hospital de la Plana. «La gente priorizó ir a cenar y comer en Navidad, ir a ver a personas de alto riesgo y ahora se está pagando, lo paga el sistema sanitario. Debemos asumir que es culpa nuestra», lamenta este sanitario. «La Plana está colapsada, como lo están el resto de hospitales, a pesar de que sabíamos lo que nos podía venir. Es una guerra contra alguien que no ve», destacó, al tiempo que aventura que esta coyuntura se alargará, al menos, un mes.

«No hay una orden, pero se hace un cribado para la UCI»

«La UCI está completa y derivamos pacientes al General. No hay ninguna orden expresa, pero hay gente mayor a la que ya no se intuba en intensivos porque hay que hacer un cribado para ver quien es potencialmente salvable», señala una enfermera de una planta covid de Vinarpos, quien asegura que la dureza de sus palabras refleja la realidad a la que se están enfrentando los profesionales sanitarios. «Se nos cae el alma al suelo, porque estamos pagando el desmadre navideño de que ya se advirtió», afirma, al tiempo que tilda de «dantesca» la situación. «Nos estamos dejando la piel, porque a veces esto resulta impagable», concluye.