Damas de sector. Mujeres que muestran su sacrificio inmenso en pro de la fiesta. Junto a las madrinas, en el primero de los peldaños festeros y en la primera de las bandas para lucir con las galas de castellonera.

Mañana sábado, a las 23.00 horas en el Palau de la Festa, y a escasas dos semanas de la peregrinación a la blanca ermita de la Magdalena, en el Castell Vel, Castellón se rendirá a los pies de la mujer. Un tributo a quienes hacen posible anualmente la magia y el encanto de unas fiestas mayores que, con el sello turístico internacional, posiblemente son los mejores festejos del mundo. Música, poesía, danza y canción para volver a sentir el aroma a pólvora, la pasión por las raíces y el enamorado carácter de los castellonenses por su tierra más hermosa. Y como siempre, será una ceremonia de sorpresas, de emociones contenidas, de refrendo de los valores castellonenses simbolizados en ese monumento de luz llamado gaiata, referencia insondable del castellonerismo puro.

GAIATER DE L’ANY // Y en el marco de un protocolo que se mantiene inalterable a lo largo de los años, durante el homenaje a las damas de sector, la entrega del título de Gaiater de l’Any. Este año recae en la figura de José Prades García, el inefable y singular ingeniero municipal, quien ha dedicado esfuerzos y horas enteras para el estudio, la documentación y el anecdotario de nuestro pueblo, “del nostre poble”, como bien le gusta decir a Prades (más información en la página cuatro de este suplemento especial que recoge el currículo castellonero de vértigo de un hombre enamorado de su tierra, de su luz).

Prades recoge el testigo de otros castellonenses ilustres que han ostentado el cargo de Gaiater de l’Any, como el maestro José Gargori, el también músico y durante años director de la Banda Municipal de Música, Francisco Signes, el siempre recordado Carlos Murria, quien fue el primer secretario de la extinta Junta Central de Festejos de la Magdalena, José Antonio Lleó Montoliu, uno de los mejores presidentes de gaiata que ha tenido la ciudad, el veterano José Rovira, o Javier Martí, también en la evocación, y cuyos montajes coreográficos permanecen en el recuerdo. Y es que, el ‘mon gaiater’ es la expresión de un camino sin retorno de historia y tradición en la fiesta magdalenera.

Como también es tradición, el discurso de la reina de las fiestas, Dunia Gormaz Campos, que cerrará un capítulo de preludio en el avance de la luz de las gaiatas hacia el tercer domingo de Cuaresma.

Dunia no defraudará. Sus mensaje de ánimo, complicidad y empuje hacia sus compañeras de viaje en este año maravilloso arrancarán el aplauso encendido de un Palau de la Festa gaiater. Que desde el pasado 27 de septiembre, cuando se inició el ciclo de presentaciones, ha refrendado el carácter esencial y fundamental de los sectores como baluartes del porqué hay Magdalena todos los años. Magdalena, festa plena!. H