Las necesidades cambiantes del sector y de los clientes hacen que las marcas se replanteen de cara a un futuro cercano la fórmula de venta de los coches. Una de las fórmulas que va cogiendo cada vez más fuerza es la venta directa. Esta es, precisamente, una de las nuevas fórmulas en su modelo de negocio que promueve en su nueva etapa Smart, cuyos dos principales accionistas son Mercedes y Geely.

Alberto Olivera, responsable del negocio en España, reconoció durante el lanzamiento del nuevo Smart #1 que "la marca renace con este producto, que aúna lo mejor de los dos mundos. Es un diseño vanguardista, puro y compacto dirigido por Mercedes y una tecnología y una digitalización hecha por Geely que permite también incorporar la conectividad de última generación. El Smart #1 es un coche completamente eléctrico, basado en una plataforma concebida para ello, con una autonomía de 440 kms (WLTP), una longitud de 4,27 metros, una amplitud de las plazas traseras similar a un Clase E de Mercedes y el nivel de digitalización es toda una revolución".

Esta revolución se amplía a su comercialización, puesto que se apuesta por la venta directa. El CEO de Smart en España remarca que "el mundo de la automoción, efectivamente, está un poco loco. La movilidad eléctrica, con la irrupción del comercio electrónico, ha puesto la casa patas arriba. Aprovechando el lanzamiento de esta nueva era nos adaptamos y este coche se va a vender a través de un modelo de agencia. Hasta ahora teníamos concesionarios a los que las marcas suministraban coches y ellos hacían el trato".

Olivera señala que "a partir de ahora, facturaremos al cliente final después de una experiencia omnicanal, en la que el cliente entrará en una página web para configurar su coche desde casa, elegir los opcionales y comprar directamente o a través de un renting, seleccionando si el coche se lo entregamos en un punto de venta o en casa".

Doble experiencia

El responsable de Smart en España apunta que "la experiencia la puedes tener tanto cien por cien digital como cien por cien analógica, acudiendo a un punto de venta. El vendedor seguirá trabajando en la misma plataforma electrónica que lo haría desde casa, con lo que siempre habrá un único canal de comunicación. No habrá discusión por el precio porque estará fijado, incluyendo campañas y promociones, pero nos centraremos en ofrecer un buen servicio, asesoramiento y una buena experiencia de compra".

Todas las fases de compra se pueden hacer por la vía digital, pero si una persona que está interesada en comprar un Smart #1 quiere ver y tocar el coche "dispondrá de espacios en algunos concesionarios Mercedes -26 en toda España- para ello. Es un concepto de exposición sobre exposición. Es decir, el coche está integrado en la exposición de Mercedes sin barreras físicas y el cliente podrá ir a ver su Smart, con el reto de que el negocio sea rentable para nuestros socios".

Alberto Olivera también hace hincapié en que "la industria de la automoción tiene que reinventarse y al final el camino que emprendemos es un modelo de venta. Hay quien está a favor o en contra, pero la red actual está contenta de no tener que competir por precio. Hay que centrarse en el cliente, en el asesoramiento y en el servicio al cliente".