Un vecino de Tales, de unos 60 años y nacionalidad española, ha sido detenido por un caso de presuntos abusos sexuales cometidos contra una amiga de su hija menor de edad. Según ha podido saber Mediterráneo, la víctima cuenta con 16 años y ha denunciado dos episodios de supuestos tocamientos sufridos en la casa del arrestado, donde la adolescente se encontraba pasando la noche, en compañía de su amiga íntima y al cuidado del adulto.

El hombre, en una primera ocasión sucedida el pasado verano, colocó, según la menor -que entonces tenía 15 años- su mano en el muslo de la niña, acariciándola con ánimo libidinoso, según el relato de la afectada. El pasado mes de diciembre, nuevamente estando la víctima en el domicilio del detenido, se produjo un segundo caso de tocamientos.

LOS HECHOS

En esta ocasión, el varón puso su mano, presuntamente, en el pubis de la adolescente, haciendo presión sobre la zona genital --por encima de la ropa--. La niña se asustó y se marchó del cuarto. Atemorizada por lo ocurrido y con ansiedad por si el adulto volvía a tocarla, pasó la noche en la casa, llegando a orinarse en la cama por el miedo.

La menor relató, finalmente, los hechos a su madre, junto con la que denunció recientemente lo sucedido ante la Guardia Civil. Los agentes iniciaron una investigación en el marco de la cual se ha procedido a la detención del presunto autor de los abusos.

Aunque no se trata de un delito de índole sexual de especial gravedad --los hechos se produjeron por encima de la ropa y solo en una ocasión, los tocamientos fueron en las partes íntimas de la niña--, los efectivos del cuartel de Onda han arrestado al hombre y han llevado las diligencias instruidas ante la autoridad judicial por un presunto delito de abusos sexuales a una menor.

El pasado año el Tribunal Supremo condenó a dos años de prisión y otros cinco de libertad vigilada a un vecino de Castellón que realizó tocamientos a una niña de ocho años, que también era amiga de su hijo y estaba a su cuidado, pernoctando en su piso.

Los abusos --más graves que los acaecidos presuntamente en Tales-- tuvieron lugar durante la Magdalena del 2014. De madrugada el adulto le bajó el pantalón del pijama a la pequeña, le practicó tocamientos en sus partes íntimas y llevó la mano de la menor hasta sus genitales. Todo ello en la misma cama en la que también estaba su hijo pequeño.