El próximo domingo cerrará sus puertas la edición 2019 del Salón Internacional del Automóvil de Fráncfort (IAA), que se ha venido celebrado desde el pasado día 12 de septiembre con el coche electrificado como gran protagonista.

La entrada en vigor el próximo día uno de enero de una normativa anticontaminante todavía más restrictiva que la actual -y cuyo incumplimiento llevará aparejadas cuantiosas multas económicas- ha obligado a los fabricantes a multiplicar sus esfuerzos en el ámbito de la electrificación, como paso obligado para situar sus emisiones por debajo del máximo exigido.

El resultado ha sido una auténtica eclosión de modelos eco, que ya se viene anunciando desde hace meses pero que ha alcanzado su máximo apogeo en la muestra alemana. No en vano, la notoriedad de los modelos eléctricos e híbridos en Fráncfort ha sido tan grande que ha ensombrecido el estreno de novedades de combustión muy importantes y de gran calado comercial.

Las grandes protagonistas, por tanto, han sido las propuestas eléctricas, coches como el Volkswagen ID.3, el Honda e, el Porsche Taycan, el Mini SE, el Cupra Tavascan, el Seat Mii electric o las diferentes declinaciones electrificadas de otros interesantes estrenos, que se han convertido en el eje central del salón.

MÁS NOVEDADES Por suerte, los modelos ‘convencionales’ también tuvieron su cuota de protagonismo en la exposición germana porque, aunque nadie duda que el coche eléctrico es ya una absoluta realidad, serán los vehículos diésel y de gasolina los que en el corto y medio plazo sigan aglutinando el mayor porcentaje de las ventas.

En este sentido, destacan en Fráncfort novedades tan importantes como la sexta generación del Opel Corsa (que también tendrá su versión 100% eléctrica), las próximas entregas del Audi A4 y el Hyundai i10, el Mercedes GLB, los nuevos Kuga y Puma de Ford o la última generación del Skoda Superb, estos últimos también con versiones híbridas o híbridas enchufables.