El deporte del automóvil, como el resto de las actividades deportivas y sociales, también se ha visto abruptamente paralizado como consecuencia de la crisis internacional del coronavirus.

A las primeras cancelaciones y aplazamientos anunciados a principios de marzo, se han ido sumando en esta última semana otras que afectan a las competiciones que tenían previsto realizarse durante los próximos meses de abril y mayo.

El parón no solo ha afectado a las pruebas nacionales o europeas, sino que alcanza igualmente a los certámenes internacionales de primer nivel.

Tras la cancelación del Gran Premio de Australia, con el que el 15 de marzo debía haber arrancado el Mundial de Fórmula 1 (cuando tanto los equipos como los pilotos se encontraban ya en Melbourne), la FIA ya ha comunicado la cancelación o el aplazamiento de las siete siguientes carreras del campeonato, que estaban programadas en Baréin, Vietnam, China, España, Holanda, Monaco y Azerbaiyán.

MÉXICO, POR LOS PELOS // El resto de los certámenes internacionales también se han visto afectados por la pademia. El Mundial de Rallys, por ejemplo, sí pudo comenzar en enero en Montecarlo e incluso celebrar también su segunda manga en Suecia. Pero el Rally de México, sin embargo, se disputó ya con la crisis del coronavirus en marcha, debiendo incluso suspender su ultima jornada; y el martes se confirmó que las citas de Portugal e Italia también se aplazan.

La Fórmula E, por su parte, anunció una remodelación de todo su calendario y el Mundial de Resistencia ha visto cómo las 24 Horas de Le Mans, su carrera más emblemática prevista para mediados de junio, se retrasaba hasta septiembre.

En España, como es lógico, las cosas no han sido muy distintas. El Nacional de Rallys, el campeonato estrella, también ha aplazado su inicio tras la cancelación de su primera prueba, y el resto de las especialidades han corrido la misma suerte.

En Castellón, el Rallysprint de Llucena, previsto para este próximo sábado, y el Eco Rally de la Comunitat Valenciana, programado para mediados de abril, han tenido que aplazarse a la espera de acontecimientos.