Es la configuración más exclusiva del Opel Insignia, porque ofrece una imagen crossover muy original y diferenciadora sin tener que renunciar a ninguna de las ventajas que proponen el resto de las versiones de la berlina alemana. Y está a la venta desde 37.660 euros.

El Opel Insignia Country Tourer ha sido desarrollado a partir de la carrocería Sports Tourer o familiar y comparte con ella la mayor parte de sus elementos mecánicos, además del tamaño.

Mide cinco metros de longitud, una dimensión considerable, y cuenta con una distancia libre al suelo ligeramente mayor (dos centímetros más) que la del Sports Tourer. Pero son sobre todo las protecciones plásticas distribuidas a lo largo de su carrocería las que aportan esa imagen de SUV que marca la diferencia.

En el interior, en cambio, las modificaciones son mínimas y resulta difícil distinguir a primera vista un Insignia Country Tourer de un Sports Tourer. El espacio disponible es más que generoso, con unas plazas traseras amplias y un maletero de 560 litros de capacidad, que permite transportar accesorios deportivos particularmente voluminosos, como una bicicleta o unos esquís abatiendo uno de los asientos posteriores. Además, los acabados son muy buenos y el equipamiento, completo y tecnológico.

variaciones La gama combina la única carrocería disponible con tres motorizaciones diferentes, una de gasolina con 260 caballos y dos diésel de 170 y 210 CV.

Las dos más potentes solo se ofrecen asociadas a un sistema de tracción integral a las cuatro ruedas y caja de cambios automáticas, pero Opel también propone una versión de tracción delantera y cambio manual junto al propulsor turbodiésel de 170 caballos.