con la paz social en el azulejo prácticamente asegurada para los dos próximos años gracias al marco laboral firmado a finales del 2018, el otro gran convenio vinculado a la industria de la provincia, el del metal, afronta semanas decisivas para su renovación. Mientras los empresarios tratan de rebajar la tensión y las demandas de los trabajadores, los sindicatos lamentan que la negociación esté «estancada» y amagan con iniciar de forma «inminente» las movilizaciones.

La industria del metal emplea en Castellón a entre 8.000 y 10.000 personas, ya que agrupa no solo a los trabajadores de las empresas de maquinaria cerámica sino también a los de las firmas de componentes de automóviles, los mecánicos, los electricistas y los fontaneros. El responsable de CCOO en la negociación, Javier Galarza, aseguró que las próximas dos semanas serán «claves» , pues «si no hay avances no es para nada descartable la convocatoria de una huelga».

POSICIONES ENCONTRADAS

El principal escollo para el acuerdo de unas conversaciones que seguirán el próximo lunes es la petición de los sindicatos de incrementar los sueldos un 3%. El presidente de Asebec, Juan Vicente Bono, consideró «inasumible» esta demanda, pues «si bien es cierto que en los últimos años ha habido un crecimiento en el sector, nos hallamos en un momento de cambio y las empresas sufren dificultades crecientes».

HORAS EN FIN DE SEMANA

Con todo, Bono se mostró esperanzado en llegar a un acuerdo «pronto» e incluso dijo ser partidario a aceptar parte de las peticiones de UGT, CCOO y del Sindicato Intercomarcal de Trabajadores de Castellón (SIT), que también tiene representación en el sector. Entre estas demandas, y además del aumento de sueldo, los representantes de los trabajadores incluyen un incremento del precio de las horas realizadas en fin de semana y más flexibilidad en sus puestos de trabajo. El convenio caduca a final de año.