Hasta 11.000 trabajadoras de los almacenes citrícolas de la provincia de Castellón --más de 60.000 en el conjunto de la Comunitat, según UGT-- verán mejorado su sueldo en más de un 5% de aquí al final de la campaña 2019/2020 tras el acuerdo alcanzado entre patronal y sindicatos, lo que evita la celebración de la huelga que se había convocado para mañana mismo y que amenazaba con parar los almacenes durante una semana entera.

La paz social no ha sido fácil. Empresarios de comercios privados, cooperativas agroalimentarias, UGT y CCOO se sentaron a negociar a las 16.30 horas del lunes, encierro del que no se levantaron hasta aproximadamente las seis de la madrugada de ayer martes. El esfuerzo por buscar el consenso pone de manifiesto el interés de todas las partes por evitar un paro cuyas consecuencias hubieran sido muy negativas, ya que la campaña citrícola está en pleno apogeo y la fruta se está viendo muy afectada por las recientes lluvias y el calor y la humedad que impera en estos días.

La mejora salarial, pese a ser el punto central de la discordia, no ha sido lo único que ha mejorado en el nuevo convenio del sector de la manipulación y envasado de cítricos. También se ha conseguido que la nocturnidad se retribuya un 10% más caro, se flexibilice la confección de bolsas de trabajo para la realización de horas extra; la ultraactividad del convenio será de tres años y la categoría de encajadora sin experiencia durará 30 días, frente a los 75 del anterior texto, entre otros puntos, conforman el preacuerdo del convenio, que se rubricará el 23 de diciembre.

LAS REACCIONES // El presidente del Comité de Gestión de Cítricos (CGC), Vicente Bordils, que representa a los comercios privados y que son el grueso de la patronal afectada por el convenio, mostró a Mediterráneo su «moderada satisfacción» sobre el resultado de las negociaciones. «El convenio es especialmente positivo en tanto garantiza un umbral de estabilidad tanto para empresarios como para trabajadores». «Se ha impuesto la cordura y de esta forma se ha evitado una huelga que habría sido la puntilla en esta difícil temporada para todo el sector citrícola», añadía Bordils.

Por su parte, fuentes del sector de las Cooperativas Agroalimentarias, entidad que está presidida por Cirilo Arnandis, también afectados por el convenio pero minoritarios dentro de la patronal, expresaron su «satisfacción» por alcanzar un acuerdo que «permite desconvocar una huelga que hubiera sido muy perjudicial para el sector» por las vigentes circunstancias del pixat y estar en el punto álgido de la campaña. Las mismas fuentes añadieron que «se ha llegado a una situación de equilibrio donde todos hemos cedido».

Por su parte, desde UGT resaltaron la mejora de muchos puntos del convenio, caso de la retribución del complemento de nocturnidad. Desde CCOO, Javier Galarza manifestó su «satisfacción» por el «excelente trabajo realizado en las asambleas y en la mesa».