La pobreza energética, como término mediático, tiene apenas cuatro años, aunque existe desde mucho tiempo antes. Siempre ha habido familias que no podían pagar la luz, a quienes se le acumulaban las facturas de la compañía eléctrica o para las que encender la estufa en invierno era un lujo. Pero Rosa, la anciana de Reus de 81 años que falleció en noviembre del 2016 tras dos meses sin electricidad porque no podía pagar los recibos, dio visibilidad al problema. El Gobierno reaccionó y ahora, casi un año más tarde, acaba de entrar en vigor el nuevo bono social eléctrico, que consagra la prohibición de efectuar cortes de luz a los consumidores que sean declarados vulnerables severos en riesgo de exclusión social. Es decir, aquellos cuyos ingresos son tan bajos que reciben ayuda de servicios sociales.

En Castellón serán unos 33.000 los hogares que se podrán beneficiar del nuevo bono social eléctrico. Se trata de una cifra muy similar a la de los beneficiarios de los actuales descuentos, dado que según la compañía Iberdrola unas 32.000 familias de la provincia están acogidas al bono social vigente hasta ahora, 283.000 en la Comunitat Valenciana.

Los descuentos

Si hasta ahora los descuentos se aplicaban solo si se tenía poca potencia contratada, se cobraba una pensión mínima o estaban todos los miembros de la unidad familiar en situación de desempleo, el nuevo modelo de bono social cambia radicalmente el criterio para conceder el descuento e introduce el de renta. O sea, podrán acceder a una rebaja en el recibo, que va entre el 25 y el 40%, en función de los ingresos y del número de hijos menores, las familias que realmente lo necesiten. Salvo las que sean numerosas, es decir, las que tengan tres o más descendientes menores de 18 años. Estas tendrán derecho a una rebaja del 25% cobren lo que cobren.

Los requisitos

¿Pero qué requisitos hay que cumplir para tener descuentos en la factura de la luz? En el caso de una persona sola, la renta que permite disfrutar de un descuento del 25% en la factura se sitúa en un poco menos de 11.300 euros al año, cuantía que se eleva a cerca de 19.000 euros, por ejemplo, en el caso de una familia con dos menores. También son considerados consumidores vulnerables los hogares formados por pensionistas con pensiones mínimas y las 6.000 familias numerosas de la provincia. Los consumidores vulnerables severos tendrán un descuento del 40% .

Las familias que actualmente disponen del bono social lo podrán mantener durante seis meses sin necesidad de renovarlo.

Cómo se solicita

Las nuevas podrán presentar su solicitud y la documentación acreditativa por diversos medios: por teléfono, en la web de la comercializadora; en las oficinas de la empresa; por fax, por correo o por e-mail a la dirección que señale el comercializador.