Las empresas contratistas pusieron ayer punto final a las obras de mejora del firme en la calzada en sentido sur de la variante de la Vall d’Uixó de la autovía del Mediterráneo (al menos así lo preveían en el Ministerio de Fomento a media tarde, cuando se lo comunicaron a este diario). La conclusión de los trabajos en los dos carriles de circulación hacia Valencia llegó acompañada de grandes retenciones, de las que fue testigo Mediterráneo --se puede ver un vídeo en la web oficial de nuestro diario--. En concreto, a media tarde miles de vehículos se encontraron totalmente parados en dicha calzada en sentido sur a lo largo de varios kilómetros justo antes de la zona de obras. Desde la zona de la Vall la retención llegaba hasta Nules, donde la salida previa permitía a los conductores desviarse y evitar pararse.

Tras la conclusión de los trabajos, las dos calzadas de circulación han quedado abiertas al tráfico durante el fin de semana, mientras en la madrugada del lunes se prevé retomar las actividades constructivas en la otra calzada, la sentido norte, según fuentes de la Delegación del Gobierno en Valencia. Está previsto que estos trabajos se desarrollen durante 5 días, como los que ahora han concluido, y que esta obra, que alzó una gran polémica a finales del año pasado, quede resuelta y el firme de la A-7 mejorado.

La intención de Fomento era reducir estos plazos, pero finalmente no ha sido posible.