Asociaciones agrarias como la Unió o AVA-Asaja exigieron ayer un mayor control de las Administraciones para frenar la entrada de bacterias como la Xylella fastidiosa, que ha conseguido entrar en territorio español, en Mallorca, donde ha afectado al cerezo. Pero esta plaga también puede perjudicar a otros cultivos, entre ellos, la vid, el olivo o los cítricos, y de ahí la preocupación del sector. También el senador por Compromís, Carles Mulet, indicó que la presencia de la bacteria apunta a que «algo falla en los controles sanitarios en España»; y criticó que «Europa es un coladero».

En la misma línea, el secretario general de la Unió de Llauradors, Ramón Mampel, instó a extremar el control y añadió que «la Conselleria ha activado el plan de contingencia». Por su parte, el presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado, lamentó que se demuestra «la política suicida de la UE en control de plagas». H