Una propuesta en la que toman parte más de 120 personas, ante más de 800 espectadores. Estos son los ingredientes de la Passió per la Trencà de Alcalà de Xivert, que desde hace cinco años supone un complemento a los tradicionales actos religiosos y procesiones de esta localidad.

La representación surgió desde el grupo El Repiquet, y desde este 2018, una nueva asociación se encarga de coordinar los preparativos del montaje. Su presidente, Paco Bruñó, menciona que en la noche del Viernes Santo «actuarán más de 60 actores, a los que sumamos los integrantes del colectivo de bombos y tambores y la banda de música». En cuanto a los ensayos, «en cada edición incorporamos nuevos elementos, y en esta ocasión se incluyen un par de escenas», detalla. Intérpretes aficionados llevan con los ensayos desde el final de las navidades, para lograr la moción del público con los pasajes de la muerte y resurrección de Cristo.

ASISTENTES / Uno de los factores que explican la consolidación de este proyecto es la implicación de buena parte de la sociedad civil de Alcalà. Además, son muchos los visitantes del núcleo de Alcossebre que acuden a contemplar el espectáculo, «en un entorno tan especial como la plaza de la Iglesia, que constituye un marco incomparable», justifica. Las personas con movilidad reducida tendrán un espacio reservado.

El origen de la obra está en la rompida de la hora, que recorría las calles de Alcalà. En su primera edición se interpretaron unos pocos pasajes de la vida de Cristo, y al año siguiente se dio el salto con un formato más extenso.