El enfrentamiento entre animalistas y la Federación de Caza de la Comunitat por las batidas de jabalís en el Desert de les Palmes, lejos de apaciguarse, tras los altercados del pasado sábado, parece que va a más, tal y como avanzó ayer martes Mediterráneo. El delegado de la entidad en Castellón, Pablo Molina, insiste en que el asunto está en manos de los servicios jurídicos de la entidad, aunque todo indica que terminará en una demanda judicial.

Según las denuncias recogidas ayer por este diario de los cazadores, un grupo de animalistas presionaron y trataron de boicotear la jornada de caza lanzando cohetes de caña en este parque natural protegido. Finalmente, con la presencia de la Guardia Civil, pudo realizarse la batida, a diferencia de lo ocurrido el 14 de febrero, cuando sí se suspendió.

El colectivo que pidió el permiso para concentrarse el pasado sábado fue ProDesert, que ayer se desvinculó por completo del lanzamiento de cohetes, así como de las pintadas que aparecieron delante del el domicilio del presidente del Club de Cazadores El Desierto de Benicàssim, Juan Marqués, en las que se podría leer: «Si te gustan los animales, no te los comas».

«He llamado a Juan por teléfono para decirle que nosotros no tenemos nada que ver con lo de la pintada. Eso es una falta de respeto y no es nuestro estilo. Condenamos este tipo de hechos», explicó Joaquín López, presidente del colectivo, quien insistió en que la asociación se halla conformada por vecinos que viven en las urbanizaciones cercanas al Desert y que están en contra de la gestión que la Conselleria de Medio Ambiente está realizando de este espacio natural: «Nosotros vivimos aquí y tenemos familia, nunca se nos ocurriría lanzar cohetes y provocar un incendio».

Por su parte, Molina explicó que desconocen la identidad de los que tiraron los artificios pirotécnicos, pero remarcó que una persona con la camiseta de ProDesert se coló dentro de la zona de caza durante la batida y que «la veintena que había allí concentrados» les «insultaron».