La patronal azulejera Ascer y los sindicatos UGT y CCOO afrontan este viernes (11.00 horas) una cita crucial para intentar desatascar la negociación del convenio colectivo de las empresas cerámicas. El encuentro se presenta clave porque los sindicatos han asegurado que del resultado de la reunión dependerá que las dos organizaciones sindicales sigan adelante con su amenaza de realizar protestas en el contexto de la feria Cevisama, que arranca en Valencia en apenas poco más de dos semanas, una acción que empeñaría la imagen que las empresas tratan de transmitir al mundo en este escaparate. Sin embargo, ambas partes acudirán sin variar ni un ápice las líneas rojas que durante más de un año vienen defendiendo, y que imposibilitan que se apruebe el nuevo marco laboral que ha de regular el trabajo de los 14.500 profesionales de las azulejeras.

El presidente de Ascer, Isidro Zarzoso, ha repetido hasta la saciedad en los últimos meses que empresarios y sindicatos están condenados a entenderse, si bien también ha matizado que el actual contexto de incertidumbre internacional obliga a ser conservador en las pretensiones económicas que exigen UGT y CCOO para garantizar la viabilidad de las empresas a largo plazo y, por tanto, el empleo. Así justifican propuestas como la congelación y eliminación del complemento salarial de la antigüedad y la aplicación de cláusulas de compensación y absorción salarial, para equiparar todos los sueldos y que ningún profesional esté por encima de lo fijado dentro de las tablas salariales oficiales.

Precisamente, estos dos puntos son los que para UGT y CCOO son innegociables. “Que se olvide Ascer de estas dos reclamaciones”, advierte el secretario general de MCA-UGT-PV, Ismael Sáez. Y es que estima que, de aplicarse la compensación y la absorción salarial, “más del 70% de los trabajadores del azulejo no verán incrementado sus salarios, pese a que se pacte una subida”. Sí están dispuestos a negociar el incremento de horas de la jornada laboral, “hasta un máximo de 16 horas anuales” y a cambio de que “se compren” y la revisión salarial al alza, punto que ahora la patronal propone un 0,3% en el 2015, y un 1% para 2016 y 2017. H