La detección de la covid-19 a través de una prueba PCR en laboratorio dejará pronto de ser lo habitual. El Ministerio de Sanidad ha incluido ya oficialmente el uso de los nuevos test rápidos de antígenos -distribuidos por el laboratorio Abbott- para realizar detección precoz del coronavirus SARS-CoV-2 y, además, lo ha hecho por la puerta grande: sustituyendo casi en todos los escenarios una prueba por otra, eso sí, siempre que el paciente sospechoso tenga síntomas y estos sean derivados de menos de cinco días de evolución.

Así queda recogido en la última actualización de la estrategia ministerial de Detección Precoz, Vigilancia y Control de covid-19. Según el documento, para detectar el virus en personas con síntomas que no vayan a necesitar hospitalización (ya sea en centros de salud, urgencias ambulatorios o de hospitales), el test será la primera opción a utilizar si hay síntomas y estos han empezado hace cinco días o menos. Lo mismo sucede en las pruebas que se vayan a a hacer a personas a ingresar, trabajadores sanitarios o aquellos ya ingresados que empiecen con síntomas compatibles. En esos casos, el ministerio considera tan válido hacer una prueba rápida como una PCR.

Sanidad establece que estas pruebas, con resultados en 15 minutos, están indicadas siempre que haya síntomas de hasta cinco días de evolución, de forma que se reserva las PCR para el ámbito hospitalario, los centros de mayores y siempre que haya pasado demasiado tiempo desde el inicio de síntomas

Sanidad ha dado por buenos de ese modo los estudios de fiabilidad realizados por los expertos del Instituto Carlos III de Madrid y que en un informe preliminar establecieron que la prueba tiene una sensibilidad del 93,16 % (probabilidad de detectar correctamente a una persona enferma) y una especificidad del 99,58 % (probabilidad de detectar correctamente a una persona sana).

El ministerio deja las PCR para el ámbito hospitalario, los trabajadores sanitarios o las personas ingresadas si no hay disponibilida de test rápidos o por otras cuestiones de organización; para confirmar un resultado negativo de un test en casos donde la sospecha de contagio por covid es alta o si el paciente sospechoso tiene síntomas desde hace más de cinco días o para pacientes que vayan a ir a la UCI o grandes inmunodeprimidos.

Desde Sanidad también optan por la PCR para detectar casos en los centros sociosanitarios como las residencias de mayores entre residentes y trabajadores siempre que se garantice que los resultados van a estar listos en menos de 24 horas.

Con la generalización del uso de estos test de antígenos se espera facilitar y mucho la detección de casos covid-19 ya que las pruebas, pese a que se seguirá utilizando una torunda para recoger exudado nasofaríngeo, no tienen que ir a ningún laboratorio ya que se obtienen a través de un papel reactivo en un plazo de 15 minutos lo que acelera los resultados.

El ministerio justifica su introducción al tener en cuenta el «previsible aumento de las necesidades diagnósticas» por el aumento de infecciones respiratorias como la gripe «en otoño e invierno» y la necesidad de distinguir con rapidez los casos que pueden ser coronavirus de otros que sean dolencias habituales de los meses de invernales.

Hasta la utilización de estas pruebas se tendrá aún que esperar a que estén disponibles para la Conselleria de Sanidad de forma que se puedan generalizar para la pronta detección del virus.

La Comunitat Valenciana ya ha iniciado los trámites para adquirir medio millón de estos kits de prueba al laboratorio Abbott que, además, tienen un coste que ronda los 4,5 euros, muy por debajo de lo que cuesta una prueba PCR. Según adelantó el jueves la consellera de Sanidad, Ana Barceló, se tendrán que adaptar los protocolos autonómicos para autorizar también la generalización del uso de estos test rápidos así como el protocolo de detección en centros escolares, un ámbito donde esta prueba eliminará los problemas de confinamientos masivos a la espera de resultados que se están dando actualmente.

Mientras, Ciudadanos (Cs) ha registrado una iniciativa en las Corts para exigir que la paga extra anunciada por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a los sanitarios se amplíe a todo el personal de los centros que formen parte de la red pública y a las residencias mientras dure la crisis del coronavirus. Así lo ha explicado el síndic de Ciudadanos, Toni Cantó, quien ha considerado que «todo el personal sanitario y residencial ha hecho un esfuerzo titánico para dar respuesta a la emergencia sanitaria y, sin duda, merece una justa retribución y compensación». Cantó ha comentado que Puig, en su intervención anunció esta paga extra para los sanitarios, pero se olvidó de las plantillas de los hospitales públicos con gestión privada y de las residencias concertadas, algo que ha considerado inadmisible.

Así, el líder de la formación liberal dice que fue Cs quien propuso en junio un plus salarial para todo el personal de la sanidad, que ahora el Consell ha aceptado.