La Conselleria de Medio Ambiente y la dirección del Desert de les Palmes ultiman la segunda actuación del plan de reducción de la población de jabalís en el parque natural, que consistirá en atrapar ejemplares con jaulas-trampa, al tiempo que ya negocia con los clubes de caza las próximas acciones cinegéticas en municipios como Cabanes.

El director territorial de la Conselleria, Antonio Garcia, informó a Mediterráneo de que una empresa ya se ha ofrecido para realizar una demostración de sus métodos para atrapar jabalís sin darles muerte, con jaulas-trampa que funcionan a través de una aplicación móvil y con cámaras de vigilancia. Cuando los animales entran en el recinto atraídos por la comida, estos se cierran por control remoto.

En paralelo, el departamento que dirige Elena Cebrián ultima un protocolo de actuación para trasladar a los ejemplares capturados en un vehículo de transporte autorizado al matadero de Morella, que es el único de la provincia que tiene autorización sanitaria para sacrificar ungulados. Asimismo, ya buscan fórmulas para lograr la autorización para comercializar su carne. Esta actuación, indicaron desde la Conselleria, cuenta con el beneplácito de los vecinos de la zona.

BATIDAS

La sobrepoblación de jabalís en el Desert motivó a Medio Ambiente a encargar un estudio que calculó en 750 los ejemplares existentes, lo que supone una densidad de población cinco veces superior a la recomendada. Ante esta situación, que provoca molestias a agricultures, vecinos y conductores, la Conselleria ha puesto en marcha un plan que también contempla actuaciones cinegéticas. La primera, que consistió en un gancho --un tipo de batida con menos perros y esperas-- y acabó sin ningún animal muerto, tuvo lugar la semana pasada en el término municipal de Borriol. La segunda será en Cabanes, pues la directora del parque, Gloria Romero, se reúne hoy con los responsables del club de caza de esta localidad para pactar las condiciones de la misma.