La huelga de examinadores de Tráfico, desconvocada el pasado miércoles, ha dejado una situación muy complicada en el sector de las autoescuelas, que han dejado de facturar 27.200 euros diarios. Una cifra que se traduce en un déficit acumulado de 2,9 millones de euros durante los seis meses que ha durado la huelga.

Según datos aportados por la Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Logística, Transporte y Seguridad Vial (Formaster), en Castellón el conflicto laboral ha producido una caída del 55% de los exámenes prácticos de conducir con respecto al año pasado, lo que supone que 2.454 alumnos no se han podido examinar. En el 2016, según datos estadísticos de la DGT, de junio a octubre, se realizaron 4.465 pruebas prácticas de conducir y este año, en las mismas fechas, 2.011, lo que ha producido un colapso de alumnos que quieren sacarse una licencia de conducir.

Como publicó Mediterráneo, esta huelga se ha cobrado ocho despidos en Castellón, Vila-real, Betxí, Burriana y Vinaròs, por lo que el sector pide a Tráfico examinadores itinerantes para Castellón que refuercen la escasa plantilla y permitan desatascar una situación que tildan de «caótica» en estos momentos.

Con todo, y tras la solución del conflicto laboral, Formaster ha solicitado que «se vuelva a la normalidad lo antes posible». Y para ello pide que se intensifiquen los exámenes, «para descongestionar el colapso de alumnos en lista de espera para examinarse de la prueba práctica de conducción». En este sentido, desde la asociación instan a la Dirección General de Tráfico a solucionar «el déficit de examinadores que hay en las diversas jefaturas de tráfico como la de Castellón».

La asociación hace un llamamiento a los ciudadanos para «que no dejen de acudir a las autoescuelas, pues cada una de ellas está trabajando y ayudando a los alumnos para que todos se puedan presentar a los exámenes en un plazo lógico, en el menor tiempo posible y con la mejor preparación», matizan.