Mañana el Ayuntamiento inicia la campaña en pos del ansiado consenso para dejar en su vertiente valenciana (Castelló y el Grau) los dos topónimos de la ciudad. El concejal de Normalización Lingüística, Ignasi Garcia, aseguró ayer que el grupo municipal popular (uno de los que se opone al cambio, junto con Ciudadanos) ha confirmado su asistencia a las cuatro conferencias programadas y confía en que ello sirva para cambiar el sentido de su voto, que ya obligó a retrasar el pleno en que esto se abordará, previsto para febrero.

En este sentido, Garcia pide «no utilizar la lengua como un arma de confrontación política», porque «está por encima de las ideologías». Y muestra de ello es el lema elegido para la campaña: Dos llengües una ciutat, dos llengües una identitat.

Para tratar de lograr el consenso, por algo menos de 6.000 euros el equipo de gobierno ha programado cuatro conferencias, elaborará trípticos informativos y realizará un vídeo, que pretende viralizar, con el que explicar «que recuperar el nombre de Castelló es una expresión de nuestro origen». La campaña también incidirá en ejemplos de la Comunitat y la provincia y «en lo que dice la ONU: si existe el topónimo en una lengua minorizada, se debe mantener en este».

Además, resalta el edil, lo que se pretende es «aplicar el reglamento de normalización lingüística del Ayuntamiento de 1991, que en el punto 6 establece que se trasladará al Consell que el topónimo sea en su denominación valenciana». El equipo de gobierno pretende llevar la propuesta para la recuperación del nombre histórico al plenario del 31 de mayo y a partir de ahí comenzar la tramitación ante el Consell, que podría durar «seis meses».