El vicealcalde de Castellón, Enric Nomdedéu, advirtió ayer de que las últimas acciones de protesta de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) están obstaculizando los acuerdos con entidades bancarias para lograr la cesión de viviendas, ya que piden más garantías para protegerse ante posibles ocupaciones de inmuebles. De hecho, reveló que uno de los bancos con los que el Ayuntamiento está dialogando ha interrumpido momentáneamente las negociaciones en busca de una mayor seguridad.

“Determinadas acciones no ayudan a la negociación. Hay convenios que teníamos casi firmados y ahora nos piden más garantías”, destacó Nomdedéu durante la comparecencia de prensa para detallar los acuerdos de la junta de gobierno de ayer. Unas declaraciones que llegan tras una semana en la que la PAH protestó con una acampada en la plaza Mayor por la, en opinión de sus representantes, fallida política antidesahucios del bipartito; y en referencia también a la ocupación de un edificio en Gran Vía.

“La PAH ha realizado un trabajo dignísimo para hacer visible un problema que ahora está en la agenda diaria y que nos obliga a estar atentos. Sus acciones son reivindicativas y lícitas, pero creo que no hacen falta. No ayudan a nada”, indicó el vicealcalde.

Y es que en opinión de Nomdedéu, el trabajo llevado a cabo para evitar los desahucios está siendo efectivo: “El sistema del Ayuntamiento es intentar ofrecer una solución más global a las personas afectadas, para que en el futuro no nos necesiten más. El circuito está funcionando”.

MÁS CONVENIOS // Con estas negociaciones, el Ayuntamiento busca un acuerdo similar al que ya alcanzó con Cajamar en enero, que permite al equipo de gobierno contar con una decena de inmuebles destinados a las personas que estén en las listas de servicios sociales por el peligro de perder su casa. El precio de los alquileres alcanzará como máximo los 100 euros mensuales. H