El president de la Generalitat, Ximo Puig, presidió ayer el acto de traspaso de competencias de la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública, entre la exconsellera y actual ministra de Sanidad, Carmen Montón, y la nueva titular del departamento, Ana Barceló. Con la cartera, la consellera también hereda de Montón una complicada gestión en la provincia, con multitud de asuntos pendientes de resolución.

Entre ellos, como ya detalló Mediterráneo en su edición del pasado sábado, está el conflicto que se vive en el Hospital Provincial respecto a la sentencia que afecta a los trabajadores del centro; la ampliación tanto del General de Castellón como del centro de salud I de la Vall d’Uixó --el centro de salud II también está pendiente una reforma; los problemas de falta de personal del Hospital Comarcal de Vinaròs y en el Alto Palancia y el Alto Mijares; la carencia de un especialista en Pediatría en Peñíscola; o la puesta en marcha del SAMU 24 horas para Morella y Vilafranca.

diálogo // En su discurso, Barceló resaltó que a lo largo de su trayectoria profesional y política ha podido constatar que «los mejores resultados se obtienen a través del diálogo entre los diferentes actores, cada uno desde su disciplina, sus conocimientos y su experiencia, desde todos los ámbitos en los que se trabaje, desde las organizaciones profesionales hasta la sociedad civil».

La nueva titular de Sanidad Universal se dirigió a la ministra para expresar que, desde su profundo conocimiento de la sanidad valenciana «por la que tanto ha trabajado», canalizará hacia el Gobierno de la nación «nuestras legítimas reivindicaciones y nuestras aspiraciones».

Por último, Barceló señaló que «la sanidad valenciana ya es un referente en muchos aspectos, yo aspiro a consolidarlos, a mejorar en todos los campos y a aumentar la confianza de los ciudadanos en la sanidad valenciana, porque he venido a servirla».