El presidente del Partido Popular de Castellón (PPCS), Miguel Barrachina, advirtió ayer de que «en Cataluña están viviendo, con 20 años de antelación, lo que la izquierda valenciana quiere imponer en la Comunitat: el control de las aulas y el intento de control de los medios de comunicación». Barrachina, quien hizo estas declaraciones con motivo de la conferencia impartida por el presidente del PP de Tarragona --elegido número uno para las elecciones autonómicas--, Alejandro Fernández, acompañado de la lideresa del PPCV, Isabel Bonig, y la presidenta local, Begoña Carrasco, afeó al Consell que utilice de una forma constante el argumento de que Madrid ens roba y España nos roba.

Antes del acto, en el que participaron todos los cargos populares que forman parte de la ejecutiva provincial, el máximo responsable del PPCS aseguró que su formación «está aquí para recuperar el presente y el futuro de Cataluña y España» y aseguró que «el nacionalismo solo trae pobreza y para ello cuentan con dos armas: aulas y teles, como quieren hacer en la Comunitat».

Barrachina aseguró que, «una vez más, la provincia de Castellón presta toda la ayuda a la provincia hermana de Tarragona» para que sigan siendo una autonomía con la que quieren «crecer».

Por su parte, la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, insistió en la idea de que «lo que ahora pasa en Cataluña es exactamente lo que quieren que pase en esta tierra» y señaló: «Desde el PP de la Comunitat estamos dispuestos a defender lo que cree la inmensa mayoría de gente». Bonig culpó al president socialista Ximo Puig de estar «preso del radicalismo» que representa Compromís «porque quiere», y reiteró su mano tendida para cambiar las cosas, si bien reprochó al líder del PSPV que no le ha llamado «ni una sola vez», cuando es «tiempo del diálogo» que predican desde el Consell, «pero no practican».

La presidenta del PPCV confirmó que ha recibido la carta que Puig le ha enviado para pedirle que participe en la manifestación por una financiación justa del próximo día 18, y reiteró que «no es tiempo de pancartas». E insistió en que necesitan la «ayuda del PSOE en el Consejo de Política Fiscal y el Congreso para aprobar el nuevo modelo».