El portavoz del PSPV en la Diputación y alcalde de Vila-real, José Benlloch, habló claro ayer en Castellón, el primero que lo hace, al menos entre quienes defienden en la provincia facilitar la investidura de Rajoy como única salida para evitar nuevos comicios, al asegurar que apoya la abstención, dado que «no hay ninguna alternativa», y que «unas terceras elecciones serían un flaco favor a España y a nuestro partido».

Al mismo tiempo, «desde el respeto» a todas las posiciones, fue muy crítico con la de los jóvenes alcaldes y cargos socialistas que, como adelantó Mediterráneo, suscriben un manifiesto en el que apuestan por un no al PP sin matices, y apelan, como lo ha hecho repetidamente el exsecretario federal del PSOE, Pedro Sánchez, al protagonismo de la militancia en las decisiones.

En este punto, José Benlloch tampoco dudó, al afirmar: «No creo en la democracia directa, ha sido siempre un fracaso o un fraude; creo en la democracia representativa». Si bien matizó, tras decir que apoya «la abstención», que «habría sido bueno» que les consultaran «hace dos semanas, pero no hay tiempo», y quienes les representan «han decidido que no era bueno» y lo acepta.

Añadió sobre esta cuestión que «no ha habido alternativa», de haberla habido, les habrían consultado --a la militancia-- «como lo hicieron sobre el acuerdo con Ciudadanos». En relación con la posición de los jóvenes cargos locales y de quienes recogen firmas para apoyar las tesis de Sánchez, cuyo camino no comparte, el portavoz provincial del PSPV indicó que le «gustaría que, cuando dicen no es no, dijeran también que quieren ir a unas terceras elecciones». Abundó en su valoración al señalar que «el peor servicio que se puede prestar a España a medio y largo plazo es presentar un PSOE dividido, sin un proyecto consensuado, sin una alternativa clara a un PP que ha obtenido hasta 50 diputados más que nosotros por segunda vez».

Desde el punto de vista de Benlloch, quien también hizo autocrítica al decir que «hemos hecho ya suficiente daño todos, y me incluyo», «lo que me importa son los ciudadanos y, si lo que nos espera es lo que nos viene por la izquierda, se trata del populismo con mensajes que encuentro también en la extrema derecha en Europa y en Chile», frente al que estima que el PSOE ha hecho de «dique para que los liquidadores no puedan destruir el trabajo de muchos años».

El también alcalde de Vila-real señaló, además, que en estos momentos «se trata de que el barco no se hunda, de salvar los muebles», descartando siempre unos nuevos comicios como una opción que pueda contemplarse. Recordó que si el PSOE «ha prestado un servicio muy importante a este país», ha sido por su moderación y por haber «pensado con la cabeza», de manera que rechazó las posturas que ahora lo hacen «con el corazón y con el hígado» algo, dijo, «muy fácil». H