La jovencísima Berta Montañés Selma, de 10 años, será la máxima representante infantil durante las próximas fiestas de la Magdalena. Lo hará “cargada de ilusión” y “muy feliz”. En el fondo, confiesa que tenía un pálpito que le hacía creer que acabaría siendo la elegida, pero, al mismo tiempo, reconoce que era muy difícil, puesto que “todas las candidatas querían tener la suerte de poder representar a la ciudad en una fecha tan especial”. Un periodo que Berta califica como “la mejor semana del año”. “No solo por las vacaciones”, puntualiza, sino por “todo lo que simbolizan las fiestas de la Magdalena”.

Pese a su juventud, atesora una larga trayectoria festera a sus espaldas. Del 2008 al 2013 ejerció como dama de honor infantil de la gaiata 8, Portal de l’Om, en el 2014 fue madrina de honor y este año ha sido dama de la ciudad. Un largo periplo en el que ha tenido en todo momento el respaldo de su familia. “Mis padres siempre han estado pendientes de mí e, incluso, se han alegrado más que yo al recibir la noticia”, asegura la flamante reina infantil.

A la hora de elegir cuáles son los actos que más le gustan de las fiestas, le cuesta pronunciarse, pero finalmente se decanta por el pregón infantil, la Romeria y, especialmente, la imposición de bandas. “Me apetece muchísimo presenciar ese momento. A partir de ahí es cuando empieza mi reinado de forma oficial”, recalca la joven, con mucho desparpajo.

Berta reconoce que durante la llamada de Amparo Marco para comunicarle la noticia estaba tan nerviosa que solo podía dar gracias. “Soñaba con vivir algún día este momento, pero es que no me lo podía creer. Ha sido muy especial cuando toda una alcaldesa te da la enhorabuena”, afirma.

Es consciente de que su vida va a cambiar a partir de ahora y que su agenda para la próxima Magdalena “estará plagada de actos”, pero la joven se ve preparada para todos los retos que va a entrañar ser la reina infantil de las próximas fiestas. El primer paso para esta futura estudiante de quinto de Primaria empieza esta misma mañana, cuando Berta vaya al Ayuntamiento para conocer al resto de damas que la acompañarán a lo largo de esta andadura. “Me muero de ganas de conocerlas”, concluye Berta. H