Con ocasión del Día de la Visibilidad Lésbica y “contra la intolerancia”, un grupo de personas del colectivo Castelló LGTBI se han manifestado con banderas arco iris frente a la sede de Vox en la capital de la Plana. El objetivo, según el colectivo, es el de “tomar el espacio público y dar visibilidad” en este caso a las lesbianas, y han apostado por hacerlo con besos ante la delegación del partido liderado por Santiago Abascal a tres días de las elecciones generales.

El motivo de esta ubicación, según una de las manifestantes, Rita López, ha sido el siguiente: “Lo hacemos para manifestar nuestra preocupación por el posible auge que puede tener un partido que puede dar una vuelta de tuerca hacia atrás en materia de derechos”. Siguiendo con su alegato, esta misma fuente expresa que “pueden derogar leyes para cerrar una sociedad que curiosamente cada vez es más abierta”, y teme que en Castellón el partido de ultraderecha pueda cobrar fuerza: “Llevo muchos años y confío en la sociedad castellonense, pero visto lo visto en Andalucía me da un poquito de miedo”.

Una de las medidas que más teme Rita López en caso de que Vox sea decisivo a la hora de formar gobierno es que “pueda echar atrás la ley del matrimonio entre personas del mismo sexo. Ha costado mucho avanzar en materia de leyes y aunque se quedan cortas, lo poco que hemos conseguido se puede perder”, concluye una representante del colectivo Castelló LGTBI que no entendería que una persona homosexual vote por esta formación: “No tendría ninguna lógica que lo hicieran, pero los humanos somos muy absurdos”.