El sector del pequeño y mediano comercio de Castellón busca respuestas locales a los fenómenos globales que sacuden al sector. Tras el adelanto de los regalos navideños a la visita de Papá Noel y la fiesta de Halloween, la otra cita importada desde la tradición anglosajona es el Black Friday. Para este año, los negocios englobados en Covaco Castellón deciden sucumbir a los incentivos de la presente semana y presentan una alternativa. Para ello se unen a la propuesta de la patronal autonómica Confecomerç, y convocan un sorteo, cuyo ganador podrá obtener 3.000 euros.

El vicepresidente de la entidad y representante provincial, Mauro Gómez, afirmó que la acción «es interesante para el cliente, que no incide en los reiterados y continuos descuentos, y que pone de relieve la estrecha relación que guarda el pequeño comercio con las personas». Y es que el Black Friday, tan deseado por los consumidores, es visto con recelo por los responsables de las tiendas de menor tamaño.

El presidente de Confecomerç, Rafael Torres, mencionó que el movimiento de la semana está «desestacionalizando y desequilibrando las ventas de la campaña navideña», ya que la presión «sobre los márgenes de beneficio es insostenible». Como añadido, instó a volver a regular las rebajas.

TRES COMPRAS / En lo referente al sorteo, los clientes de establecimientos adheridos a la iniciativa deberán efectuar tres compras a lo largo de la presente semana. Una vez completada la tarjeta entregada a los consumidores, estos deberán acudir a las redes sociales y seguir los pasos que hay marcados en las bases. La persona afortunada deberá mostrar los tíckets de compra hechos en esas fechas, y luego gastar el dinero entre los locales asociados.