La almendra, el cultivo de moda en la provincia de Castellón, y en toda España, amenaza con invadir terrenos que ahora mismo monopoliza la citricultura. Eso es lo que al menos piensan los expertos de las organizaciones agrarias, una situación a la que contribuyen no solo los altos precios a los que se cotizan los frutos --más de 8 €/kilo-- sino también la próxima activación de la línea de ayudas de la Generalitat, ahora mismo en fase de tramitación.

“Vaya por delante que, desde Fepac-Asaja, como organización, estamos en contra de que se arranquen naranjos para plantar almendros”, indica el responsable de la sección de frutos secos de la organización agraria, Ramón Tomás. Pero sí opina que, ante el avance de la fiebre por los almendros, este tipo de cultivos se pueden “perfectamente” desarrollar “en muchas fincas de naranjos abandonadas de la Plana”.

La clave está en que se trata de zonas de regadío, con acceso al agua y con derechos de consumo de la misma. Tanto Fepac como la Unió, la otra gran organización agraria que aglutina a los productores agroganaderos de la provincia de Castellón, destacan que el grueso de la expansión se está llevando en Andalucía, Zaragoza, Lleida, Alicante... y en la mayoría de ellos se está apostando por regar los almendros por riego localizado. “Los nuevos plantones aseguran una gran productividad si se cultivan en zonas de regadío”, continúa Tomás, quien subraya que el gran hándicap de Castellón es, precisamente, que la zona donde tradicionalmente tiene lugar el cultivo de la almendra --Cabanes, Vilafamés, Vall d’Alba, Albocàsser-- tiene dificultades para acceder al agua”.

AYUDAS AL CAER // Mediterráneo ya se hizo eco en su edición de ayer de que en la actualidad los viveros de la provincia están duplicando, triplicando e incluso cuadruplicando su producción de plantones para dar salida a la demanda, ahora mismo en lista de espera de mínimo 5 meses.

Hasta la fecha, pocos se han atrevido a dar el paso, pero la próxima publicación de la orden de ayudas para la inversión en activos físicos de la Conselleria de Agricultura puede ser el espaldarazo definitivo. El secretario autonómico de Agricultura y Desarrollo Rural, Francisco Rodríguez Mulero, anuncia a este rotativo que su departamento trabaja en una orden de 40 millones de euros hasta el año 2020 para ayudar a los “agricultores profesionales” y que “acrediten una mejora de la renta de su explotación en un mínimo del 25%” ayudas para mejorar explotaciones. La orden se publicará “en 2 ó 3 meses”.

Rodríguez Mulero defiende que la Generalitat “no primará unos cultivos sobre otros”, aunque admite que “la situación actual de los frutos secos es favorable”, lo que puede hacer “interesante” esta posibilidad, que, en cualquier caso, siempre dependerá de los agricultores.

“Los frutos secos en la provincia pueden ser una gran alternativa de futuro, en plantaciones de regadío y a base de variedades más tardías para evitar heladas”, concluyen desde Fepac-Asaja. H