Los licores siempre han sido destacados, desde remotos tiempos, por sus magnificas cualidades para combatir o paliar algunas enfermedades. De hecho, los alquimistas se toparon con ellos para esos fines, aunque el uso práctico hoy día sería totalmente diferente.

Son numerosas las propiedades que contienen algunos licores. De hecho, se ha comprobado científicamente que algunos son excelentes para tratar y combatir enfermedades, siempre que no sean consumidos en exceso.

Los beneficios del consumo del licor después de las comidas son indudables. Una copita se absorbe directamente en el estomago, dilata los vasos sanguíneos y mejora el riesgo sanguíneo.

Es recomendable beberlos lentamente y a sorbos muy pequeños. Se deben de servir a temperatura ambiente, pero si se beber con hielo hay que procurar que sea de agua pura o embotellada.

El licor digestivo es especial para suavizar la fuerte sensación que queda en las papilas tas haber ingerido postres pesados.

Uno de los referentes de la destilería de la provincia es el licor Carmelitano, una bebida muy preciada, un licor de hierbas elaborado con especias muy selectas por la congregación de los padres Carmelitas, que se establecieron en el Desierto de las Palmas en el S. XVII. El traslado y fundación de las actuales bodegas y destilerías se realizó hacia 1912 y, el proceso antiguo y artesanal, se ha ampliado la gama de productos Carmelitano, con propuestas como el licor de café, conjugando recetas y directrices antiguas y artesanas con las técnicas modernas actuales. Asimismo, son famosas por elaborar la ginebra valenciana Ginself, con una personalidad muy marcada en el terreno, teniendo como principal ingrediente destacado la naranja.

Asimismo, hablar de licores en Castellón, es hablar del brandy de destilería Segarra, en Xert. Allí se encuentra al último destilador manual de España. La cuidadosa elaboración de licores por destilación de plantas aromáticas y medicinales silvestres, sin aditivos químicos sintéticos, son el distintico de cada uno de sus genuinos licores, elaborados con un alambique de cobre, calentado aun con el fuego de disolución de los principios activos de las plantas. Los brandys y licores Segarra se venden por todo el mundo, y solo se hacen 10 botellas al año, mientras que del solera se fabrican 30 y del añejo 40 botellas. Del gran Maestre solo se vende una por cliente y el año que le corresponde.

La Barreja, un clásico

La barrecha es un compuesto combinado compuesto por una mezcla de dos licores, Uno esun anisado, anís seco o anís dulce, y el otro vino moscatel de pasas (moscatel de pansa). Esta bebida fue muy popular en el Siglo XX. Se tomaba en los bares a primera hora de la mañana, para calentar el cuerpo, de ahí el dicho (‘calentar el cos i matar el cuquet’).