Lejos de mejorar, la situación empeora. La brecha de género salarial no ha dejado de crecer en la provincia de Castellón durante los últimos cinco años, hasta situarse en una tasa del 29%, la más alta de la década. Un repaso a los datos que proporciona la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) revela que en el último ejercicio las mujeres castellonenses ingresaron una media de 15.155 euros, lo que supone 6.287 menos que el promedio percibido por los varones, que alcanzó los 21.442 euros.

La escalada en esta diferencia discriminatoria se produjo sin interrupción durante el periodo comprendido entre los ejercicios 2013 y el 2018, cuando pasó de los 5.194 euros a los mencionados 6.287, respectivamente.

un tercio del dinero // Los números dibujan la realidad de que las mujeres cobran casi un tercio menos que los hombres en la provincia de Castellón. Como explican representantes sindicales como el responsable de Empleo de Comisiones Obreras, Albert Fernández, la razón no está en que se pague una cantidad distinta por el mismo trabajo en función del sexo, sino en el tipo de ocupación y del contrato.

De hecho, los sectores en los que hay mayor mano de obra femenina tienen unas bases salariales inferiores al de otros donde la mano de obra mayoritaria es la masculina. Se trata de actividades centradas fundamentalmente en los servicios y, dentro de este capítulo, el comercio y la hostelería tienen papeles protagonistas en lo que a sueldos más reducidos se refiere. Además, son las mujeres las que acaparan los contratos a tiempo parcial.

situación enquistada // Lo que preocupa a los portavoces sindicales es que se trata de una situación enquistada y sin síntomas de mejorar. En Castellón la diferencia de ingresos es la más alta desde el 2009 en términos absolutos, cuando la brecha era de 5.612 euros a favor de los varones, de modo que ha aumentado en 670 euros en ese periodo.

Igualmente gráfica es la cifra que muestra cuánto se ha incrementado el dinero declarado como ingreso medio de la mujer en los diez ejercicios estudiados: son 983 euros, mientras que los ingresos de los hombres residentes en la provincia han subido casi el doble, un total de 1.653 euros.

Los sindicatos reclaman medidas activas y efectivas que fomenten la igualdad efectiva para poner remedio a una situación de hecho que no mejora.

el entorno // El panorama es, además, sensiblemente peor que en España, donde la brecha salarial de género se sitúa en el 21%, frente al 29% de Castellón.

Tras dos años consecutivos a la baja en el Estado, la diferencia de sueldos entre hombres y mujeres volvió a subir en el 2018. Lo hizo casi un punto, hasta el 21%.

Pagar menos a una mujer por el mismo trabajo que realiza un hombre es una práctica ilegal y penada en el ordenamiento jurídico español. No obstante, las desigualdades retributivas que explican esa brecha del 21% se producen habitualmente de manera indirecta. Las ya mencionadas o mediante perjuicios como el techo de cristal (dificultar la promoción), las paredes de cristal (segregar a las mujeres a determinadas áreas) o vetar indirectamente a las mujeres para percibir algunos pluses variables. El mayor peso que asumen ellas en la conciliación familiar es uno de los obstáculos habituales.