La Comisión Europea ha afirmado que seguirá de cerca la evolución de las importaciones de cítricos procedentes de Sudáfrica, enmarcadas en el Acuerdo de Asociación Económica (AAE) con la Comunidad para el Desarrollo del África Meridional, para poder detectar posibles perturbaciones en el mercado europeo y responder «adecuadamente».

Según informó ayer el PSOE, esta ha sido la respuesta que desde la Comisión se ha dado a dos preguntas de las eurodiputadas socialistas Inmaculada Rodríguez-Piñero y Clara Aguilera en las que se pedían datos de cómo ha variado el volumen de las exportaciones citrícolas desde el acuerdo entre octubre y noviembre y si hay previstas medidas.

Rodríguez-Piñero y Aguilera recordaron en su pregunta a la Comisión que el acuerdo con Sudáfrica extendió su periodo de aplicación hasta el 30 de noviembre, «lo que ha provocado que los productores españoles alerten de que las grandes cadenas europeas siguen adquiriendo las variedades tardías de Sudáfrica a tenor de sus bajos costes».

Desde Bruselas, el comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Phil Hogan, ha respondido que el volumen de importaciones de naranjas de Sudáfrica ha aumentado un 5% entre 2017 y 2018 durante el periodo de fuera de temporada, del 1 de junio al 15 de octubre, pero que se ha reducido un 39% entre el 16 de octubre y el 30 de noviembre. En este sentido, apuntó también que las naranjas frescas representan solo el 2% de las importaciones anuales.