El Ayuntamiento de Burriana arranca la renovación de toda la red de agua potable del cementerio municipal. Ante estos trabajos, el recinto permanecerá cerrado hasta que finalice la intervención, a mediados de mayo.

«Esta medida es tan necesaria como ineludible, porque la instalación es muy antigua y las tuberías se encuentran muy deterioradas, por lo que sufren innecesarias e importantes pérdidas hídricas y, consecuentemente, continuas reparaciones», detalla el concejal Hilario Usó.

Con un presupuesto de alrededor de 36.000 euros, la modernización permitirá, a juicio del edil, «mejorar y garantizar completamente la calidad del servicio». En concreto, arreglarán aproximadamente 600 metros lineales de tuberías, con un diámetro de entre 32 y 40 mm. Asimismo, colocarán 11 bocas de riego y tres nuevas fuentes de agua, así como aprovecharán para reponer pavimento y hormigón.

MÁS ACCIONES // Por otro lado, entre las intervenciones previstas también incluirán un cambio en la infraestructura de alumbrado que va desde la puerta de entrada hasta la ermita, cuya distribución, a día de hoy, es aérea.

El responsable municipal avanza que el camposanto volverá a abrir al público en unos 15 días, una vez esté finalizada la remodelación y después de proceder a la desinfección del recinto.

El importante plan de ampliación y urbanización del cementerio arrancó recientemente. Para ejecutarlo, los operarios colocaron un vallado que permitió acotar el acceso a los 76 nuevos nichos, en el solar adyacente.

El resto de sepulturas ya están disponibles, aunque faltan detalles por completar de las obras. Entre los pasos pendientes estaba el asfaltado del camino por el que transcurrirán los cortejos fúnebres que se dirijan a la zona.

En esta primera fase, en la que invertirán 400.000 euros, han construido un total de 140 nichos. La reforma sufrió numerosos reveses burocráticos que retrasaron su ejecución, lo que motivó las continuas críticas por parte de la oposición. A estas trabas se sumó a mediados de marzo el estallido de la crisis del coronavirus y el estado de alarma decretado por el Ejecutivo.