No hay nada como ver la cara de ilusión de los más pequeños. Fue la sensación predominante en la cabalgata de Reyes de Castelló, una de las citas ineludibles del calendario, y que siempre es uno de los momentos más alegres en cada año que comienza.

La participación, tanto dentro como fuera del desfile, resultó muy multitudinaria y vistosa, con más de 450 integrantes, 13 carrozas, y 8.000 kilos de caramelos lanzados para endulzar la espera de unos niños que de esta forma iniciaron su particular cuenta atrás para recibir los regalos solicitados en las cartas.

Según los cálculos de la Policía Local, unas 30.000 personas salieron a las calles para disfrutar del evento, y muchos de ellos no tuvieron inconveniente en esperar para ver el espectáculo desde las mejores posiciones.

En esta ocasión, el mundo del circo fue la temática elegida como hilo conductor de una comitiva que partió desde las 19.00 horas de la avenida del Lledó, a la altura del monumento al gigante Tombatossals, para adentrarse por las calles del centro de la ciudad. Hubo coreografías y vestidos de ensueño. Y participación entusiasta de mucha gente. La mayoría, personas anónimas que pusieron su grano de arena para amenizar la espera de las plataformas que transportaban a Melchor, Gaspar y Baltasar. Pero también hubo quien se halla a otro nivel de relevancia. Sin ir más lejos, la concejala de Fiestas, Pili Escuder, que bailó con un grupo de majorettes. Lo hizo como integrante de la Federació de Colles, accediendo a la petición que le fue realizada la tarde antes, detallaron desde el consistorio. Luego se cambió para estar en el comité de bienvenida en la casa consistorial.

También hubo una representación de las tradiciones autóctonas, como una selección de las gaiatas, grupos de bailes típicos y collas. Todo ello estuvo amenizado por las formaciones de dolçainers i tabalaters.

El primer tramo del recorrido siguió por la plaza María Agustina, para continuar por Gobernador, Borrull, Guitarrista Tárrega, Asensi, plaza de la Paz y calle Mayor, con la plaza Mayor como escenario final. Desde el balcón del Ayuntamiento tomaron la palabra los tres monarcas, para saludar a la concurrencia y desear que tanto ellos como sus familias pasen un año lleno de felicidad. Además, la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, hizo la entrega de la llave de la ciudad, con la que los monarcas tuvieron vía libre para ir por todas las casas y depositar los presentes.

NOVEDADES / Los asistentes pudieron comprobar algunas de las innovaciones aplicadas para este 2020. Entre ellas, las nuevas plataformas antipercances, con dispositivos como luces intermitentes y de freno, barandillas y faldones de seguridad para evitar sustos. Otro aspecto fue la presencia de una persona que se dedicó a trasladar en lenguaje de signos las palabras de los Reyes, tanto en el Grau como en el centro de la ciudad. Fue un detalle inclusivo, para conseguir que todos pudieran disfrutar por igual de esta noche tan especial.

Dentro de este propósito, se dispuso de dos plataformas reservadas a gente con movilidad reducida, tanto en la plaza María Agustina como frente al escenario de la plaza Mayor. Fue, en definitiva, una manera de aplicar el reciente galardón obtenido por el municipio dentro de sus actuaciones en este importante campo.

Los fuegos artificiales se combinaron con el alarde de luces led en las carrozas, y también en los atuendos de los participantes. Un brillo que no es capaz de eclipsar el que desprenden los verdaderos protagonistas de la velada. Cuatro de ellos, por primera vez, fueron los afortunados en un sorteo, que les permitió ver, sin esperar a la mañana de hoy, sus regalos.