Eran pocos minutos antes de las seis de la mañana del pasado martes, cuando un motorista de 55 años que circulaba por la carretera de l’Alcora a Onda falleció atropellado por un camión, tras caer de la motocicleta a causa de un jabalí que invadió presuntamente la calzada. Se trata del cuarto accidente de tráfico con heridos en lo que va de año provocado por un animal, según datos de la Jefatura Provincial de la Dirección General de Tráfico (DGT) en Castellón. Desde enero se han registrado cinco heridos no hospitalizados, además de este fallecimiento. Una cifra que se dispara casi hasta el centenar teniendo en cuenta las cifras acumuladas los últimos cinco años.

El pasado año se contabilizaron 20 siniestros con animales implicados que ocasionaron 38 víctimas; cinco de ellas tuvieron que ser hospitalizadas. En el 2017, fueron 19 accidentes con 26 heridos, frente a los 12 con 14 víctimas del ejercicio anterior. En el 2015 hubo ocho siniestros en los que resultaron heridas 11 personas. Por tanto, fue durante el pasado año cuando más incidentes de esta índole se produjeron.

La mayoría de estos fueron provocados por jabalíes que invadieron vías de circulación, aunque también las cabras montesas son otros animales que aparecen como causantes. Sin duda, este asunto pone sobre la mesa la necesidad de controlar la población de cerdos salvajes, que va a más en la provincia, como denuncian de forma reiterada cazadores y agricultores. El incremento de población de esta especie ha supuesto que se localicen cada vez más en zonas cercanas a la costa, donde acuden muchos días para buscar alimento.

De forma paralela a la temporada de caza, que arranca el próximo sábado 12 de octubre, la Conselleria de Medio Ambiente autoriza batidas puntuales, aunque las mismas resultan insuficientes, como explican los cazadores, para poner cerco a esta plaga.

A la hora de asumir el seguro los gastos derivados del siniestro cuando se registra un accidente de tráfico con animales salvajes implicados dependerá de si ese día está marcado como de caza en el coto donde se localiza la carretera del siniestro. «Cada coto cuenta con una aseguranza y esta se responsabiliza de los daños por accidente de tráfico si es jornada de caza, según el plan aprobado», explicó el delegado provincial de la Federación de Caza de la Comunitat, Antonio Museros, quien subrayó que esta está siendo la decisión que están tomando los jueces en los últimos años. Y es que, desde el 2014, de acuerdo con la ley de Seguridad Vial, las pólizas de los cotos --más de 160 en la provincia-- ya no son siempre las que sufragan los daños a terceros.