La vida del cirujano maxilofacial Luis Senís se ha complicado sobremanera en los últimos seis meses. Si el pasado marzo se difundían varios vídeos suyos en los que mantenía relaciones sexuales con una mujer, ahora la Policía Nacional lo vincula al tráfico de drogas. De escándalo en escándalo sale a la palestra el nombre del castellonense, quien fue muy cuestionado en pasado mes de marzo cuando se distribuyó a través de WhatsApp un vídeo en el que él y otra sanitaria practicaban sexo ataviados con batas de quirófano.

Ante las críticas y comentarios, el protagonista de las imágenes se apresuró a desmentir que estuvieran manteniendo relaciones en un quirófano. «Fue un error, pero se grabó cuando el hospital estaba casi vacío por la noche y en los vestuarios», se defendió el castellonense. «Hackearon mi móvil y descargaron todos mis archivos y contactos. Hasta la policía está alucinando con este caso», aseguró Senís.

Un caso similar es el que vivió en sus propias carnes la exconcejala socialista de Los Yébenes Olvido Hormigos, víctima de la difusión de un vídeo erótico en el que ella aparecía y que la obligó a dimitir de su acta en el Ayuntamiento. En su caso, que saltó a las portadas en agosto del 2012 y la acabó convirtiendo en un personaje televisivo, la Justicia nunca dio la razón a Hormigos, que denunció por un delito contra la intimidad y la integridad moral a un futbolista acusado de la difusión y al alcalde.

PENAS DE TRES A SEIS AÑOS

En esta ocasión, con su detención por un delito contra la salud pública, el cirujano podría enfrentarse a penas de cárcel que oscilan entre los tres y seis años por tráfico de una sustancia que causa grave daño a la salud, como establece el Código Penal.