El calor da un respiro en la provincia de Castellón en este inicio del otoño, pero será breve, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que espera una sensible recuperación del mercurio cara al fin de semana, hasta rozar de nuevo las máximas de 31 grados, en un contexto en el que este miércoles está vigente una alerta amarilla por lluvias en toda la franja de la costa.
En todo caso, en solo 24 horas, entre el mediodía del lunes y la misma hora de ayer, martes, las temperaturas registraron caídas de hasta 11 grados en algunos puntos de litoral, como es el caso de Vinaròs, aunque en el interior también hubo descensos significativos como los 10 grados de Atzeneta, los 8 de Segorbe o los 7 de Morella, mientras que en la capital se midieron 22 grados, 7 menos también que la víspera.
HASTA 20 LITROS EN UNA HORA //
En lo que se refiere a las previsiones, para toda la jornada de este miércoles Aemet ha activado la alerta amarilla por lluvias, que pueden acumular hasta 20 l/m2 en una hora en la franja litoral.
La predicción para el conjunto de la provincia espera cielos nubosos o cubiertos, con precipitaciones, que pueden ser localmente bastante fuertes. La agencia no descarta que vayan ocasionalmente acompañadas de tormenta. En cuanto a las temperaturas, se vaticinan sin cambios importantes y, por lo tanto, moderadas y sin calor excesivo, tal y como ocurrió el martes. Por último, el viento soplará del nordeste, moderado en el litoral y flojo en las comarcas del interior.
Tras el respiro, Aemet espera que el termómetro vuelva a alcanzar los 31 grados de máxima el sábado, 29 de septiembre, en la capital; al igual que en Segorbe, mientras que en otros puntos como Castellfort los valores más elevados se situarán en el entorno de los 25 grados, lo que supondrá, en todo caso, diez más que los registrados cuatro días antes.
Para domingo y lunes, las temperaturas se suavizarán solo ligeramente y se esperan algunas precipitaciones en puntos del interior de la provincia.
