La reforma del Camí la Plana absorberá prácticamente la totalidad de los 5 millones de euros destinados este año a inversiones financieramente sostenibles por el Ayuntamiento de Castellón, según ha podido saber este periódico. Aunque poco ha trascendido todavía del proyecto de remodelación, al estar todavía en una fase inicial, de valoraciones técnicas y presupuestarias, todo apunta a que incluirá un carril bici y dará más protagonismo al peatón y al ciclista, además de mejorar la seguridad del vial. Y es que el Camí la Plana se ha convertido en uno de los viales que más se utiliza para conectar Castellón con la playa y con Benicàssim, sobre todo para quienes quieren sortear el núcleo del distrito marítimo, a donde desembocan las avenidas del Mar y Hermanos Bou, además de la autovía del puerto.
La obra acaparará la partida de inversiones sostenibles del 2018 después de una compleja negociación del presupuesto municipal, entre el bipartito y Castelló en Moviment. Fue a mediados de enero, en pleno debate sobre las cuentas -para las que PSPV y Compromís necesitaban del necesario apoyo externo- cuando lanzaron una contraoferta al que entonces llamaron su «socio prioritario» que pasaba por hacer concesiones en materia de vivienda y gestión medioambiental, consiguiendo en esta operación -aceptada por CSeM- derivar las obras del Camí la Plana a las inversiones sostenibles.
Hace justo un año, y antes de que se trabajara en el proyecto actual, desde el equipo de gobierno explicaron que para mejorar la seguridad del Camí la Plana, valorada entre 3 y 5 millones, se descartarían, a priori, expropiaciones de terrenos, y se barajaba poder cubrir la acequia.
