A un día de iniciarse la actividad lectiva en la Universitat Jaume I, la consellera de Universidades, Innovación, Ciencia y Sociedad Digital, Carolina Pascual, repasa cómo afrontan los centros públicos de educación superior el arranque de un curso marcado por la pandemia y se pronuncia sobre retos como la financiación, el sistema de becas o las nuevas titulaciones.

La UJI inicia el periodo lectivo mañana lunes. ¿Cómo afrontan las universidades valencianas la vuelta a la actividad presencial?

El inicio del periodo lectivo es una buena noticia porque retomamos la actividad académica y el alumnado valenciano puede volver a las clases. Hemos trabajado conjuntamente desde hace meses en preparar el inicio del curso en un protocolo que hemos tenido que ir adaptando a los nuevos escenarios y las medidas sanitarias. Este trabajo conjunto nos permite que haya coordinación entre todas las universidades.

Me gustaría destacar, además, que dos proyectos de universidades valencianas van a implantarse en todos los campus. Uno de ellos es una herramienta tecnológica para evitar el control de aglomeraciones y trazabilidad en caso de contagio, desarrollado por la Universitat Poltècnica de València. El otro es de la Universitat Jaume I y consiste en el análisis de las aguas residuales por sectores, lo que nos permitirá conocer los focos de covid de forma bastante precisa.

Lleva algo más de un año al frente de la Conselleria. ¿Qué balance hace de este periodo?

Ha sido positivo, pero también complicado. Somos una Conselleria nueva y la primera que se establece fuera de València, así que desde ese punto de vista ha sido complejo, teniendo en cuenta que también hemos tenido una crisis sanitaria sin precedentes.

Cuando llegamos, lo primero que observamos es que nuestras propias ayudas al sistema científico tenían un alto nivel de complejidad burocrática que dificultaba mucho la labor de los investigadores y que el talento que habíamos sido capaces de atraer con el programa GenT tenía luego poco tiempo para consolidar sus proyectos. Todo esto lo hemos estado corrigiendo. El hecho de ser científica precisamente ayuda a detectar estos desajustes que en ocasiones pasan desapercibidos.

La rectora de la UJI, Eva Alcón, ha reivindicado de nuevo la urgencia de incrementar la financiación de la institución. ¿Tiene prevista alguna mejora en este aspecto de cara al próximo ejercicio?

Sabemos la situación de la financiación de las universidades públicas y es algo que compartimos con la rectora de la Universitat Jaume I, Eva Alcón, y con el resto de las universidades públicas.

Conformamos una mesa de expertos con integrantes de reconocido prestigio y responsables de Universidades y Hacienda de la Generalitat. Sin embargo, la pandemia nos impidió continuar su desarrollo con normalidad como habíamos planificado. Ahora retomamos la actividad: el 21 de septiembre fue la primera reunión y se ha establecido un calendario estable de encuentros cada diez días. Esta mesa trabaja en un borrador del nuevo plan de financiación que tendrá que circularse entre todos los actores implicados, porque se tiene que hacer bajo tres premisas: que sea plurianual, incentivador y consensuado.

Estudiantes de Castellón lamentan el retraso en la resolución de la beca dirigida a cubrir las tasas del curso pasado. ¿Hay alguna previsión de agilizar el proceso?

Este año ha habido complicaciones extraordinarias y es verdad un cierto retraso en la resolución de las becas de exención de tasas. En este proceso intervienen muchas administraciones a distintos niveles y la situación excepcional ha causado el retraso, que no debería haberse producido. Sin embargo, también quiero destacar que todas, absolutamente todas las personas que la hayan solicitado y cumplan requisitos la recibirán.

¿Se plantea llevar a cabo una nueva bajada de tasas universitarias a raíz de la situación actual?

La Generalitat valenciana ha tenido una política de tasas magnífica: un 15% de bajada, con un descenso del 8% en 2017 y del 7% en 2018. Cada año presupuestamos 21 millones de euros que destinamos a universidades para compensarles económicamente por esta reducción. Es un gran esfuerzo pero vale la pena. Además, la Conferencia General de Política Universitaria acordó volver a niveles de 2011 y ha dado tres años para hacer una bajada gradual. Hemos empezado este año con una reducción del 5% en las carreras más caras, precisamente en grados sanitarios y de ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas.

La implantación del Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte en la UJI estaba prevista para este curso pero se paralizó por la crisis sanitaria. ¿Cuándo se retomará este proceso?

El proceso ya se ha retomado. Según la normativa, el 1 de septiembre comienza el plazo para que las universidades que deseen implantar un grado presenten la documentación y tramiten la solicitud y tienen hasta el día 15 de enero para hacerlo. Después, se estudia toda la documentación y se toma la decisión. Es cierto que el proceso es lento y que tenemos que mejorarlo, pero también garantiza la igualdad de oportunidades y que las decisiones se toman con criterios de objetividad. En los casos especiales de los títulos que se dejaron sin aprobar pese a tener toda la documentación en regla, vamos a acelerar el proceso.

En el Debate de Política General de este lunes, el president Ximo Puig avanzó algunas de las medidas de la Estrategia Valenciana de Recuperación. ¿Cuáles son las acciones en el ámbito universitario que prevé en este marco?

La Generalitat valenciana tiene muy en cuenta al alumnado universitario y en esta Estrategia Valenciana de Recuperación incluye un gran pacto por la juventud y la puesta en marcha del plan Ariadna. Además la inversión en ciencia es una clarísima apuesta. El president anunció que el Plan de Recuperación prevé actuaciones en las universidades por valor de 425,5 millones de euros para el centro de excelencia, transferencia de resultado de investigación, apoyo a jóvenes investigadores o inversión en infraestructuras.

La pandemia ha evidenciado la importancia de la investigación. ¿Qué va a hacer para incentivarla en el futuro próximo?

Me alegra decir que tenemos proyectos desafiantes en marcha y me gustaría destacar especialmente la institución valenciana de excelencia científica internacional para atraer talento de investigadores de primera línea, que tendrá su sede en Castelló. Este centro se extenderá por todo el sistema científico valenciano, al que se incorporarán investigadores de muchísimo talento y proyección internacional.

Muchos de ellos traerán financiación europea y contribuirán a mejorar la investigación en la Comunitat Valenciana. La inversión que hagamos en este centro tendrá un efecto multiplicador en el territorio y, además, un retorno altísimo porque permitirá aumentar el número de patentes, atraer recursos e inversiones de Europa y transferir conocimiento a las empresas, lo que causará efecto en el tejido productivo.