La portavoz del grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, afirmó ayer que el «no» del equipo de gobierno a las 30 enmiendas del PP para los próximos presupuestos municipales, «vuelven a darles una bofetada en la cara a los vecinos», puesto que estaban basadas en sus aportaciones. «PSPV y Compromís vuelve a fallar en la forma y en el fondo, porque tratan de simular transparencia y participación y porque siguen siendo absolutamente improductivos y sectarios para los castellonenses». Además, Carrasco criticó que «se incrementa el gasto de personal, pero no aumentan ni los servicios ni las inversiones que percibirán los castellonenses, ni tampoco bajan los impuestos. De hecho, los vecinos han visto incrementados los pagos en los últimos cuatro años».

Acompañada de los ediles Juan José Pérez Macián y Carlos Feliu, censuraron «la subida en el gasto en personal, pese a que lo que se crea es empleo temporal; el aumento de la recaudación por el IBI rústico, aunque dicen que ha bajado, y los ingresos ficticios que prevén conseguir con licencias urbanísticas, cuando estas están paralizadas, además de la creación de una área de protocolo dotada con más de 330.000 €».

Preguntada sobre si el PP estaría dispuesto a apoyar al gobierno en la aprobación del presupuesto si CSeM se abstiene, avanzó que «no», porque no se han tenido en cuenta sus demandas.