En la provincia de Castellón trabajan 15.944 ciudadanos de origen rumano, la comunidad extranjera más importante en la actualidad, razón por la cual la ministra delegada para las Relaciones con los Rumanos en el Extranjero, Natalia-Elena Intotero, haya visitado este fin de semana la capital para conocer el «nivel de integración» de sus compatriotas, en la provincia de España donde existe una mayor concentración de estos inmigrantes, después de la de Madrid.

Intotero fue recibida por la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco; la vicealcaldesa, Ali Brancal, portavoces y concejales de todos los grupos municipales, y el jefe del consulado de Rumanía en Castelló, Dragos Tigau.

LOS MÁS NUMEROSOS / Desde el Ayuntamiento se destacó ayer que la comunidad rumana comenzó a llegar a Castellón a mitad de los años 90 «atraída por el dinamismo económico y laboral de la capital de la Plana». Pronto se convirtió en la colonia extranjera «más importante de la ciudad» y aunque la crisis económica «propició el retorno de buena parte de ellos a su país de origen, aún es la más numerosa».

Según el Instituto Nacional de la Seguridad Social, en la provincia se contabilizan 29.506 ciudadanos extranjeros, de los cuales 15.944 son rumanos; 11.364 están inscritos en el régimen general, 2.056 en el de empleados del hogar y 1.703 son autónomos, datos facilitados por el consistorio para reforzar la idea de que el trabajo es un fundamento esencial para la integración.

Aparte de «analizar el nivel de integración», en la reunión se abordaron otros asuntos como «el desarrollo de cursos sobre lengua, cultura y civilización rumana en los colegios de Castellón», cursos dirigidos, según el Ayuntamiento, «a todos los niveles, especialmente a Primaria y Secundaria». El material necesario, como programas de estudio o libros didácticos, los proporciona el Instituto de la Lengua Rumana.