La falta de un marco administrativo legal que regule el uso del patinete eléctrico en la ciudad de Castelló tiene los días contados. El Ayuntamiento de la capital de la Plana perfila los últimos flecos ---está pendiente del informe del asesor jurídico-- para aprobar, «en el pleno de noviembre o diciembre», la ordenanza que reglamentará cómo los ciudadanos deben utilizar este vehículo de movilidad.

Así lo explicó ayer a este diario el concejal de Movilidad Sostenible del consistorio capitalino, Jorge Ribes, quien detalló que el texto de esta norma municipal incluirá el requerimiento -como publicó Mediterráneo-- de que solamente se podrá circular con el patinete por carriles bici, ciclocalles en las que tienen prioridad los peatones y en los viales del casco urbano, con una velocidad máxima de 30 km/h --algunos de estos la superan, según el modelo--. «Además, el casco será obligatorio y estará prohibido circular por calzadas y aceras», afirmó.

En cuanto al uso del patinete, Ribes recordó que este es «individual», por lo que en ningún caso se permitirá que dos personas ---adultos o niños-- se desplacen en este vehículos. En este sentido, hay que hacer especial hincapié en que cada vez son más los padres y madres que cada mañana llevan a sus hijos al colegio en este medio de transporte, tal y como ha podido comprobar Mediterráneo. Una práctica que estará completamente prohibida por la ordenanza antes de final de año.

Evitar accidentes

«Es importante que la ciudadanía sepa que la utilización de estos patinetes estará regulada y quien circule en uno de estos tiene que conocer que el peatón siempre tiene prioridad, incluidos los pasos de cebra», recalcó el edil, quien no descartó la programación de campañas pedagógicas «para evitar accidentes graves que puede ocasionar una mala utilización de este vehículo en la ciudad». «Hay que tener civismo», continuó.

«Se trata de un fenómeno nuevo en Castelló que, debido a su proliferación y a que cada vez ha ido a más, debemos regular y así lo vamos a hacer», concretó Ribes. También explicó que el Ayuntamiento de Castelló toma como base y ejemplo para su texto legal la ordenanza que a este respecto tiene València.

Hay que recordar que la falta de una normativa sobre el patinete eléctrico crea confusión en los usuarios del mismo, que desconocen a qué norma acogerse para la correcta circulación. Ahora, el consistorio ha decidido regularlo y la ordenanza será una realidad en los próximos meses.