El pleno del Ayuntamiento de Castellón ha aprobado hoy por unanimidad un nuevo paquete de inversiones financieramente sostenibles en las que se invertirán 5,1 millones de euros y supondrán la remodelación integral de espacios y edificios públicos así como la renovación de sistemas antiinundaciones.

Los votos favorables de todos los grupos municipales, el Gobierno local financiará con el superávit del presupuesto del año pasado un total de siete inversiones que ponen el acento en el microurbanismo y que redundan en el beneficio de la ciudadanía de Castellón.

Las inversiones

Los proyectos, que deben licitarse antes de acabar el año, incluyen la remodelación urbana de la avenida Enrique Gimeno, entre las avenidas de l’Alcora y Ribesalbes por unos 752.000 euros. También se prevé completar el proyecto de mejora de la entrada norte, con la segunda fase de la habilitación de un aparcamiento verde frente al Hospital General. El proyecto costará 382.000 euros.

Las inversiones en materia hidráulica también tendrán cabida en este paquete de actuaciones, con el proyecto del incremento de alivios de la acequia de la Obra (segunda fase) y alivio de la acequia de la Ratlla, que tienen un presupuesto de 800.000 euros. La instalación de infraestructuras para la reutilización de agua en la ronda de circunvalación (en el tramo entre el camí fondo y la calle Periodista Paco Pascual) se eleva a 452.000 euros. La adecuación de la estación de bombeo del Planetario costará 164.000 euros.

Entre las nuevas inversiones sostenibles destaca también un plan de asfaltado, dotado con 270.000 euros, que prevé actuar en zonas en las que sea preciso una mejora integral de la calzada. En esa línea de microurbanismo, destaca también la reforma de las calles Pablo Iglesias y Arquitecto Ros. También se acometerán dos nuevas fases de la remodelación del Grupo Rafalafena Tarongers, con una inversión cercana a los 400.000 euros.

Aprobación de Ordenanzas Fiscales

Además, el pleno también ha aprobado la modificación de cuatro ordenanzas fiscales: Impuesto sobre Bienes Inmuebles, Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras, Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica y la tasa por la recogida de residuos sólidos urbanos.

La nueva ordenanza del IBI contempla una reducción de un 7,69% en el coeficiente (del 0,74 hasta el 0,69), un descenso al que hay que sumar el 5% practicado el año pasado. Además, también habrá una bajada de los valores catastrales, solicitada por el Ayuntamiento al Ministerio de Economía, que aplicará una bajada lineal del 9,1% en el precio de los inmuebles. En el caso del IBI de rústica el descenso es de un 25%.

El impuesto de construcciones baja del 3,75% al 3,5% y en el caso del Impuesto de Vehículos se han incorporado nuevas bonificaciones para fomentar el uso de las energías renovables y la reducción de la contaminación. Los coches eléctricos, los híbridos y aquellos que utilicen hidrógeno, tendrán una bonificación del 75% durante los cinco primeros años desde su matriculación.

En lo que respecta a la basura, se ha procedido a la congelación de la tasa, a pesar del incremento de los costes de la gestión del tratamiento de los residuos sólidos. Y se ha ampliado el plazo de solicitud de la tarifa hiperreducida para aquellas familias en riesgo severo de exclusión social. También se ha modificado el cálculo de la tasa para los despachos profesionales compartidos, de manera que se pagará una cuota única.