Si la Generalitat valenciana tramita en estos momentos solicitudes para la implantación en Castellón de proyectos de energías renovables por una inversión de 1.000 millones de euros, con el horizonte de los cinco años como plazo de ejecución del conjunto, como publicó ayer Mediterráneo, desde la patronal Avaesen, estiman que, el crecimiento en su conjunto de esta actividad puede cuadruplicarse en los próximos años, ya que el ritmo de trabajo actual de las empresas presenta un «aumento exponencial», señaló ayer el vicepresidente de la organización, Fidel Roig.

El también empresario con sede en Castelló explicó que, después de que el sector viera paralizar prácticamente su actividad en una larga travesía del desierto, en estos momentos la actividad está justo en los inicios de su reactivación, aunque de un modo intenso, ya que «en solo doce meses se están impulsando tantos proyectos como en los cuatro años buenos cuando el sector se puso en marcha», relata.

Además del desbloqueo de la tramitación de los parques eólicos en la provincia, Roig puso en valor que es el autoconsumo industrial en fotovoltaica una de las áreas que más potencial tiene aquí tras la mejora legal por las características propias de su principal sector, el azulejero. Indicó que «las empresas cerámicas tienen en marcha sus procesos de producción durante las 24 horas del día y los 365 días del año, por lo que puede rentabiliza el sol al máximo, además de consumir más de lo que genere con sus plantas solares, por lo que no hay problemas de retorno a la red».

El vicepresidente de Avaesen añadió que el gran tamaño de las cubiertas también facilita la colocación de las placas y evita pérdidas en trayecto, por lo que los proyectos «crecerán exponencialmente en este campo», reiteró.

Además de la gran planta solar de autoconsumo que prepara Pamesa y de la que anunció Ceracasa, solo Valfortec, la empresa de Roig trabaja ahora en casi 40 instalaciones de autoconsumo, de las que una quincena se corresponden con azulejeras.