Las vacaciones al aire libre, que tienen su mejor ejemplo en los cámpings, son una de las más modalidades más buscadas este verano por sentir que son más seguras frente al covid-19 que los espacios cerrados. En Castellón, pocos reabrieron el pasado 18 de mayo y en su mayoría han esperado a la fase 3 para preparar sus instalaciones y dar servicio al turista, de manera escalonada, a lo largo de esta semana. El presidente de la Federación de Cámpings de Castellón y representante de Ashotur, José María López, explica que la intención es estar todos a punto, en costa e interior, dando servicio, cara a Sant Joan: «Unos abrirán este lunes, otros el viernes o fin de semana, e incluso ya la semana próxima, los días 22 y 23».

PROTOCOLO DE LA COMUNITAT

Los alojamientos están preparando sus instalaciones y a la espera del «documento de consenso» de medidas anticovid-19 más concretas, uno autonómico que adapte el protocolo del Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE). Todo a fin de unificar cómo se regula el espacio común de piscinas, baños, animaciones, gimnasio o parque infantil. Extras que han ido a más y que son muy valorados por los clientes. Existen casos en los que se ha pensado en fijar turnos horarios de grupos para bañarse o utilizar la zona deportiva. «Por ejemplo, si una piscina tiene aforo para 100 personas, 50 podrán acudir a una hora y otros 50, a otra. Otra forma no hay. Es crucial cumplir los aforos y la distancia de 1,5 ó 2 metros», recuerda López. «Por ahora, las máquinas recreativas permanecerán cerradas. Veremos a ver. En la zona de restaurante muchos habían preparado mesas con mamparas de metacrilato de separación que ahora ya no sirven», apunta.

¿Y qué pasará con la temporada? La daban por perdida, pero tienen esperanza. «Las reservas van, pero muy despacio, sobre todo de bungalows. Sin embargo, la demanda de parcelas con baño privado y ducha para autocaravanas se ha disparado y ya el menor porcentaje es la tienda de campaña», puntualiza.

CAÍDA DEL 50% DE OCUPACIÓN RESPECTO AL 2019

Con todo, el sector prevé que la ocupación mermará en torno a la mitad en comparación con otras campañas estivales. «La verdad es que incluso con un descenso del 50% nos damos por satisfechos, porque esperábamos un cero», dice. El perfil del turista que va reservando es eminentemente nacional, «al 99%», y «familias con niños que buscan pasar sus vacaciones estando más al aire libre, en un cámping, debido al virus».Las medidas de seguridad ante el covid-19 implican también la formación específica del personal de las instalaciones, que ya están rescatando de los ERTE.

ESPERAN NUEVOS CLIENTES Y UN 'BOOM' EN AGOSTO

En ocho de cada 10 cámpings creen que este verano tienen una oportunidad de atraer nuevos clientes que antes no eran usuarios de alojamientos al aire libre y que ahora buscan las características y valores tradicionales de este sector. «Este tipo de alojamiento es inherentemente adecuado para un mundo poscovid-19 por su situación en plena naturaleza, sus instalaciones al aire libre y su precio competitivo», asegura el fundador de la web especializada pitchup.com, Dan Yates. El sondeo elaborado por esta empresa apunta que ahora el cliente busca «contacto con la naturaleza y estar al aire libre». Y eso se constata, pues la mayoría de establecimientos han recibido llamadas preguntando por las fechas de apertura de los cámpings, cara a viajar al entrar en la nueva normalidad. Las fechas más solicitadas son el mes de agosto y se da un pico a final de julio.

EL TESTIMONIO. CÁMPING TAURO DE BENICÀSSIM

La directora del cámping Tauro de Benicàssim, Pura Tárrega, relata cómo se han adaptado con medidas especiales frente al coronavirus. «Estamos con los preparativos para la reapertura, para este miércoles, 17 de junio. Llevamos varios días con labores de desinfección y limpieza de todo, según lo que nos marca la guía de cámpings», explica. Además, indica que van «a poner toda la cartelería sobre aforos, geles hidroalcohólicos, habrá puertas solo de entrada y otras solo de salida» y marcarán «los flujos de las personas cómo tienen que ser», detalla. El personal que atenderá a los turistas este verano ha hecho cursos de formación del covid-19 para saber cómo tienen que actuar. «Llevamos a cabo todas las pautas que marca Sanidad para reabrir», subraya. INFORMA: EVA BELLIDO.